Las Glòries prepara la urbanización provisional para usar el espacio en los años de obras

A la transformación de la plaza de las Glòries le quedan al menos cuatro años de obras. Es mucho tiempo para que el enorme recinto esté cerrado entre vallas y con zonas sin actividad dependiendo de la fase de los trabajos. Los vecinos de los cuatro barrios que rodean el espacio han reclamado una urbanización provisional para usarlo mientras tanto. El ayuntamiento ha hecho un proyecto con varias instalaciones que el alcalde Xavier Trias ha explicado in situ este jueves.

En las próximas semanas y meses, una vez vaya finalizando el derribo del último tramo del viaducto, se empezarán a construir un mirador de 12 metros de alto, en el vértice de la Gran Via y la Diagonal en el lado Besòs, una pérgola con ocho módulos, frente al edificio del Disseny Hub, y un pabellón desmontable con estructura de andamio para informar sobre la zona y sus proyectos a barceloneses y turistas, que se situará en el eje de la calle de Àlaba y en perpendicular a la Gran Via.

La urbanización provisional también incluirá la creación de espacios ciudadanos de uso abierto en los sectores donde antes estaba el mercado de los Encants, por el norte, y la parte del tambor del lado mar, por el sur. Allí se habilitarán zonas de juegos para niños y jóvenes, pistas deportivas, lugares para acontecimientos cívicos o culturales y también espacios verdes. Entre estos destaca el bosque vivero creado con las encinas que se trasplantaron del antiguo parque ubicado en el centro del tambor.