Márquez provoca la admiración de todo el mundo en su debut con Ducati

Ha vuelto. Sí, muchos, incluido él mismo, de ahí su arriesgada apuesta de cambiar de Honda a Ducati, temía por su futuro. Han sido suficientes cuatro horas a lomos de la invencible Ducati 'Desmosedici' del equipo del desaparecido Fausto Gresini para provocar la admiración de medio mundo y generar el miedo en todos y cada uno de sus rivales, incluido el nuevo bicampeón del mundo de MotoGP, 'Pecco' Bagnaia, líder de la firma de Borgo Panigale.

Márquez ha protagonizado hoy un test, el primero del 2024, impecable, asombroso, magistral, velocísimo, pues ha quedado cuarto entre 22 pilotos, a solo 0.171 segundos de Maverick Viñales (Aprilia, 1.29.253 minutos), el campeón de los test, el piloto que sería campeón cada año si los grandes premios se celebrasen los lunes. MM93 le ha sacado medio segundo a Bagnaia y ha demostrado que, en efecto, está listo para volver a pelear por la victoria en cada GP y, por descontado, por el próximo título mundial. Fisicamente está impecable y, desde hoy, posee la moto soñada, la que le permitirá volver a sonreir (esa sonrisa apareció, de nuevo, en su rostro, a las 11.42, tras detenerse en su taller después de las primeras ocho vueltas de los 49 que dió) y, sobre todo, practicar su pilotaje agresivo, determinante, ambicioso.

Sin palabras

El Mundial, el mundo, el 'paddock', los otros 21 adversarios del ocho veces campeón han podido comprobar algo que todos intuían ("creo que Marc puede hasta acabar primero estos test", llegó a decir ayer Davide Tardozzi, el jefe de Ducati que más le admira y deseaba) que ha empezado la segunda era de Marc Márquez, el genio ha regresado, ha nacido el Marc Márquez 2.0.

Y lo ha hecho con la autoridad que dominó del 2013 al 2019. Recuperado de sus múltiples lesiones y operaciones, liberado del temor de caerse con su Honda (récord de cídas en este 2023: 27) y sabedor de que, ahora, posee una moto, que, sin ser la mejor Ducati, le permitirá convertirla en candidata a la victoria sumando sus manos, su arrojo, su determinación y experiencia, Márquez invernará hasta llegado el mes de febrero cuando, en Malasia, reciba la primera Ducati del 2024, que será esta del 2023, algo mejorada, no mucho.

Marc Márquez ha podido disfrutar de su primer día de rojo gracias a la autorización concedida por Alberto Puig, Team Manager del equipo Repsol Honda, y la propia fábrica alada con la que aún le quedaba un año (2024) de contrato, y, por descontado, a la petición de que no podía hacer declaraciones sobre su nueva moto y equipo hasta el próximo 1 de enero. Y así las cosas, nadie habló de MM93 y su fulgurante debut con la firma de Borgo Panigale, pero tanto Nadia Padovani, viuda de Gresini y propietaria del equipo; Carlo Merlini, su mano derecha; Michel Marini, jefe del equipo; Frankie Carchedi, nuevo técnico de MM93 y Àlex Márquez esbozaron la mejor de sus sonrisas cuando se les preguntó por la actuación del campeonísimo de Cervera (Lleida). Y, sí, era suficiente.

Jornada apoteósica

Frío, mucho frío, mucho. Normal, 28 de noviembre. Viento, mucho viento, mucho. Normal en Cheste (Valencia), a primera hora de la mañana. El ocho veces campeón del mundo, ha cambiado este martes, en el circuito Ricardo Tormo, a los 30 años, su vida, incluso su vida personal.

Márquez se ha subido, a las 11.17 horas de la mañana, una hora y 17 minutos después de que se abriese la pista valenciana, a su nueva moto, que no es otra que la Ducati ‘Desmosedici’ que ha pilotado, durante todo este año, el francés Johann Zarco. No es la mejor ‘Desmo’, no, pues esa sigue en manos del campeón 'Pecco' Bagnaia, de su compañero Enea Bastianini y del aspirante Jorge Martín.

Antes de subirse a la moto, los familiares, la novia y todo el grupo de trabajo que acompaña a Márquez celebraba, de forma muy efusiva, con abrazos y besos la felicidad que tenían al ver al campeón en el boxe soñado, el que poseía una de las Ducati invencibles. Es más, al pasar por vez primera junto a su muro, al cruzar por vez primera la meta con su Ducati azul muy, muy, oscuro, casi negra, con el nº 93, Marc ha girado la cabeza y ha visto, con satisfacción, sin duda lo que ponía su primera pizarra con la firma de Borgo Panigale: "Bienvenido a la familia". Bueno, ponía "welcome to the family".

Todo un ritual

Márquez ha entrado en su nuevo garaje, el del equipo Gresini Racing, donde ya se encontraba su hermano Àlex, a las 10.12 horas y hasta las 11.17 no se ha abierto el taller y, ante una treintena de periodista ha debutado con su Ducati y, ya a las cinco vueltas, estaba entre los cinco mejores tiempos.

Estrella Galicia, patrocinador personal de Marc Márquez, ha inscrito en el sillón que utiliza el piloto "levántate y disfruta"

La moto de Márquez (su nuevo equipo solo ha puesto a su disposición una ‘Desmo’, mientras que el resto de pilotos utilizaban dos) era negra, con una divertida y vistosa decoración con el 93. Marc también iba totalmente de negro, pues el futuro deparará qué patrocinadores tiene Gresini y quién figurará en el mono del piloto que, sin duda, será la máxima atracción de la próxima temporada. De momento, Estrella Galicia, uno de sus patrocinadores personales desde hace ya algunos años, aparece, de momento, en el asiento de Marc en el boxe de Gresini con un estimulante mensaje: "Levántate y disfruta".

Primeras sensaciones

Después de dar las primeras ocho vueltas a Cheste con su 'Desmosedici', Márquez se detuvo en su boxe y, al quitarse el casco, lo primero que descubrimos fue una amplísima sonrisa de felicidad más que de compliciad. En ese instante, todos sospechamos, él incluido, claro, que su primera expresión denota que, en efecto, ha acertado con el cambio de Honda a Ducati. "Quiero volver a divertirme, que la sonrisa regrese a mi rostro", dijo el sábado.

Y, una vez acomodado en su silla, Márquez habló en inglés con su nuevo técnico, Frankie Carchedi, campeón del mundo de MotoGP con Joan Mir (Suzuki, 2020), a quien lo primero que le dijo es que "la moto tiene mucho agarre detrás, sí, pero, de momento, no puedo frenar agresivo porque se levanta la rueda trasera. Esta moto es menos física que la Honda, sobre todo en los cambios de dirección. Con la Honda podía entrar en curva mejor, con gas, pero, ahora, si lo intento, la moto me saca fuera de la trazada y no sé cuando perderé el tren delantero. Pero me ofrece confianza, sí", comentaba MM93 ante el 'spionaje' de SkyTV Italia.

"La moto me ofrece confianza, sí. Es menos física que la Honda, pero aún no puedo frenar agresivo porque se levanta la rueda trasera"

Marc Márquez

— Piloto del equipo Gresini Racing Team Ducati

El ingeniero italiano Gigi Dal’Igna, Director General de Ducati Corse, la compañía que ha tumbado el imperio japonés (Honda y Yamaha) en el Mundial de MotoGP, ha reconocido, con toda honradez y sinceridad, que su fábrica no quería a Marc Márquez en su estructura, como reconociendo que no lo necesitaba. “Ha sido una maniobra muy interesante del equipo Gresini y, ahora, nosotros debemos ser inteligentes a la hora de gestionar la presencia del mejor piloto de los últimos años, de un auténtico campeón, que ha renunciado a una moto como la Honda y, sobre todo, que ha roto un contrato que le unía por una temporada más para poder pilotar nuestra moto. Eso sí me parece algo digno de agradecer y yo, personalmente, se lo agradezco”.

Marc Márquez ha sido recibido por el equipo Gresini con una pizarra en la que se podía leer "Beinvenido a la familia"

Dall’Igna insistió en el hecho de que “no será fácil, como no lo ha sido este año teniendo ya en nuestra filas ocho pilotos campeones, todos ellos ganadores, gestionar todo lo que significa y rodea a una marca que debe defender, de nuevo, el título ofreciendo a sus pilotos la mejor moto posible”. El jefe de Ducati confirmó que Marc Márquez arranca el test de Cheste con todos los componentes de la moto que pilotó, el pasado domigo, el francés Johann Zarco, segundo tras el vencedor ‘Pecco’ Bagnaia, “porque tanto ‘Pecco’ como Enea (Bastianini, el otro piloto del equipo oficial) y Jorge Martín llevarán algunas piezas nuevas que, de momento, no queremos suministrar a los otros pilotos ‘satélites’.

"Es verdad, Ducati no quería a Marc Márquez, pero estamos muy orgullosos de que corra con nuestra moto y vamos a ayudarle como al resto de nuestros pilotos"

Gigi Dall'Igna

— Director General de Ducati Corse

Cuando le preguntamos a Dall’Igna si pensaba que el pilotaje de Márquez podía permitirle adaptarse rápidamente a su ‘Desmosedici’, el gurú de Ducati mostró su convencimiento de que será así. “Con nuestra moto se siente bien todo el mundo. Nuestra moto admite todos los estilos de pilotaje y la prueba es muy clara: todos los pilotos han ganado con la Ducati y, por tanto, no dudo de que Márquez deberá adaptarse, sí pero no creo que deba variar mucho su estilo de pilotaje”.

Respecto a la posibilidad de que Márquez, con sus consejos, permita a Ducati mejorar aún más su moto, Dall’Igna aseguró que “por mi parte, jamás, nunca, me he sentido inclinado a oír solo los consejos de un solo piloto. Mi trabajo es escucharlos a todos, compartir con ellos la evolución de nuestra moto porque, tal y como he comentado antes, todos ellos han ganado y están delante pese a tener formas muy distintas de pilotar. Es evidente que, como hago con todos, a partir de hoy escucharé a Marc, que, además, es ocho veces campeón del mundo, cosa que no lo es ninguno de los extraordinarios pilotos que componen la parrilla de MotoGP”.

Dall’Igna concluyó su comparecencia ante los medios de comunicación españoles presentes en Cheste, en el primer día de la temporada, con un sincero agradecimiento a Marc, pese a que él no era partidario de ficharlo, “por haber sido tan valiente y abandonar una fábrica como Honda y una gran nómina para pilotar nuestra Ducati. Ese es el mejor de los elogios para el trabajo que estamos haciendo todos, todos, en Ducati, desde el primer empleado de la oficina en Borgo Panigale hasta el campeón ‘Pecco’ Bagnaia”.