GP DE VALENCIA DE MOTOGP

La lluvia complica aún más la carrera de Cheste

José Luis Martínez, asistente de Marc Márquez, le seca el mono por la lluvia, con Santi Hernández, su ingeniero, al fondo del box del equipo Repsol Honda.

José Luis Martínez, asistente de Marc Márquez, le seca el mono por la lluvia, con Santi Hernández, su ingeniero, al fondo del box del equipo Repsol Honda. / periodico

Emilio Pérez de Rozas

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Es evidente que las motos no se han hecho para el agua y menos, mucho menos, para correr sobre mojado o, como ha ocurrido hoy en el coqueto y divertido circuito de Cheste (Valencia), bajo un auténtico diluvio. Así que el Gran Premio de la Comunidad Valenciana, que, como cada año, cierra la temporada de motociclismo, tiene un añadido muy complicado y peligroso: se corre dos días antes de que las grandes estrellas, entre ellas todos los 'magníficos', se sometan a un test vital para el 2019, al probar los primeros prototipos de sus motos del año que viene en los entrenamientos que están programados para el próximo martes y miércoles.

El martes, un día vital

"Yo, al menos, no voy a engañar a nadie: para mí es mucho más importante el entrenamiento del martes y miércoles que el gran premio de este domingo, que tiene mucho de peligroso, sobre todo si sigue lloviendo, que de positivo. No, no, nadie quiere correr en mojado y menos dos días antes de un ensayo tan vital para el futuro como el que viviremos el martes", comentó Marc Márquez (Honda), que, cómo no, pese a ser ya heptacampeón del mundo y pentcampeón de MotoGP, logró el mejor crono de la jornada por delante de dos auténticos jabatos, el australiano Jack Miller y el italiano Danilo Petrucci (Ducati), que se jugarán el bigote el domingo para ganar, si sigue lloviendo. Que seguirá, dicen.

La jornada ha sido dantesca, casi sin luz, con lluvia constante, los entrenamientos se han interrumpido, todos, en diversas ocasiones durante algunos minutos, unas veces para retirar trozos de motos accidentadas y, en la mayoría de ocasiones, porque había charcos en el trazado. "Y eso que este circuito es muy, muy, rápido a la hora de hacer desaparecer el agua, pero hay zonas donde el agua cruza la pista y ahí es donde se crean esos pequeños y peligrosos charcos", señaló Márquez, que elogió la instalación valenciana.

Y Lorenzo, en Honda

La opinión de Márquez, no tanto en cuanto a la pista sino al valor de este fin de semana, es compartida por todos los pilotos importantes de la parrilla de MotoGP. Hay que tener en cuenta que este año hay muchísimos e importantes cambios con vistas al próximo año. No solo Jorge Lorenzo aparecerá el martes vestido de Honda, también el francés Johann Zarco cambiará su Yamaha 'satélite' por la esperanzadora KTM, y el mallorquín Joan Mir se estrenará con la flamante Suzuki de MotoGP o el propio Petrucci se montará a la Ducati 'Desmosedici' 2019 que debía ser para Lorenzo, por no hablar de 'Peco' Bagnaia, el nuevo campeón de Moto2, en Ducati.

Y Viñales cambiará hasta su nº, se pondrá el 12

La cosa está que arde. Los pilotos, empezando por los 'magníficos', por supuesto, andan desesperados intentando saber cómo puede meterle mano a Marc Márquez, plantarle cara, ganarle, pues este año, además de sumar, de nuevo, tres ceros, y adjudicarse nueve grandes premios ha renovado el título tres carreras antes del final.