Siembra de nubes: qué es el supuesto programa que hay detrás de las lluvias en Dubái

Dubái vivió este lunes y martes unas lluvias de récord que ocasionaron inundaciones en varias zonas y infraestructuras de la ciudad. Los meteorólogos de Emiratos Árabes Unidos (EAU) dijeron que fue un "acontecimiento excepcional" en la historia climática del país. De hecho, la capital suele acumular 97 mililitros de precipitaciones al año y, en cambio, en apenas unas horas sumó el doble. Como se trataron de las mayores lluvias de los últimos 75 años, las especulaciones no se hicieron esperar. Sin embargo, ahora ha brotado una nueva teoría: la tormenta se debió a la siembra de nubes. Es decir, a una manipulación del clima.

Ante lo inusual de esas lluvias en Dubai, una de las hipótesis más comentadas fue que EAU había provocado esa tormenta porque el país arábigo tiene un programa operativo para mejorar las precipitaciones, dada su condición árida. En este sentido, se llegó a hablar de que habían sido provocadas por descargas eléctricas lanzadas por drones a baja altura.

Nada más lejos de la realidad, si bien es cierto que el país tiene el sistema conocido como siembra de nubes, el cual implica la dispersión de partículas finas en las nubes existentes en las que las condiciones de viento, humedad y polvo son insuficientes para provocar lluvia.

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Sustancias en el cielo

Las sustancias suelen ser el yoduro de plata y el hielo seco (dióxido de carbono congelado), que actúan como núcleos de condensación. De esta manera, las gotas de agua en la atmósfera pueden condensarse a su alrededor y precipitarse en forma de lluvia.

Sin embargo, los mapas meteorológicos demuestran que en esa zona no se han realizado operaciones de ese tipo en los últimos meses. Además, una cosa es mejorar o provocar la lluvia y otra, muy diferente, crear tormentas y provocar inundaciones.

La verdad de esas lluvias

Los expertos coinciden en que hubo una conjunción de factores y explican que la tormenta ya estaba prevista en los modelos meteorológicos horas antes de que ocurriera. Hasta el Sistema Global de Alerta sobre Inundaciones (Glofas), administrado por la Comisión Europea como parte del programa Copernicus, pronosticó con una semana vista y con mucha precisión un alto riesgo de inundaciones en una amplia zona de esa región.

Sobre la intensidad de las lluvias, los meteorólogos también dijeron que se había producido un Sistema Convectivo de Mesoescala. Es decir, una serie de tormentas de tamaño mediano causadas por nubes de tormenta masivas, formadas cuando el calor atrae humedad hacia la atmósfera.