En estas calles están los 28 radares pedagógicos y la nueva señal de tráfico en Barcelona

Entran en funcionamiento 28 radares pedagógicos nuevos, y se instala una nueva señal de tráfico para bajar de la bici y el patinete en Barcelona. Los nuevos radares tienen los objetivos de concienciar a los conductores, y las señales se han instalado en siete puntos de la ciudad para reforzar las indicaciones ya existentes que prohíben el paso de ciclos.

Una medida clave para la seguridad vial

Los nuevos radares son unos aparatos con unos paneles electrónicos que muestran a los conductores la velocidad a la que están circulando y los alertan si superan los límites de la vía, ya que indican la velocidad a la que se circula, pero no sancionarán. Funcionan desde el 1 de diciembre, y están colocados en vías con un límite de 50 km/h, excepto en tres ubicaciones donde el máximo permitido es de 30 km/h.

Los 28 dispositivos se suman a los 17 radares de punto que ya hay en el interior de la ciudad, de los que 12 están situados en entornos escolares y 5 son radares de tramo. Y a los 13 radares situados en el exterior de Barcelona, repartidos entre las rondas y los accesos a la ciudad y forman parte del plan para controlar mejor los límites de velocidad en la ciudad de Barcelona en puntos donde se ha detectado una siniestralidad especial o en entornos escolares, donde se tiene que reducir la velocidad a 30 km/h.

El objetivo de la medida es sensibilizar a los conductores y las conductoras sobre la importancia de respetar los límites de velocidad marcados. También permitirán que el Área de Movilidad pueda recoger información general del comportamiento de los conductores en toda la red, en relación con los límites de velocidad, y tomar decisiones teniendo en cuenta estos datos.

La medida se enmarca en el compromiso del Ayuntamiento de Barcelona de incrementar la seguridad vial y reducir los siniestros viales en la capital catalana. Hay que tener en cuenta que uno de los factores que, como causa indirecta, influyen más sobre los siniestros, y que agravan sus efectos, es el exceso de velocidad. En este contexto, el Ayuntamiento de Barcelona ha hecho una apuesta para dotarse de este sistema de control automático de los excesos de velocidad dentro de la ciudad, de acuerdo con los objetivos que marcan el Plan de movilidad urbana (PMU) 2024 y el Plan local de seguridad vial.

Durante los primeros días, equipos de informadores explicarán qué quiere decir la señal, informarán sobre la normativa de circulación a usuarios de bicicletas y patinetes y repartirán planos con los itinerarios ciclistas de Barcelona.

Señalización para reducir conflictos

La nueva señalización que obliga a bajar del vehículo y pasar a pie por la zona señalada pero no restringe el paso ni fuerza a buscar un itinerario alternativo. La medida es una de las actuaciones para ordenar la movilidad que prevé el Pla Endreça y tiene como objetivo ayudar a reducir los conflictos de convivencia entre los peatones y las bicicletas y los vehículos de movilidad personal. Se prevé que se implanten unos treinta puntos más antes de finales de año.