El segundo premio de la Lotería se va a gasolineras de Repsol en Tenerife

El empresario José Miguel González compró en Granadilla de Abona las 160 series del 79.712

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El dueño de la estación de Repsol en San Isidro (Granadilla de Abona, Tenerife), José Miguel González, que compró las 160 series del número 79.712, segundo premio de la lotería de Navidad y que, a su vez, las vendió en las siete gasolineras de su grupo, ha dicho que está "muy feliz por haber traído la suerte a Tenerife".

González, de 58 años, ha manifestado que debe haber 1.500 premiados con este número porque lo han vendido en las siete gasolineras de su grupo, seis en el sur de la isla y otra en La Laguna, en el norte, pero sobre todo ha dicho que entre ellos figuran los más de 100 empleados de su empresa. Él se ha quedado con tres décimos que destinará, explica, a seguir generando ganancias y empleo.

Este empresario tinerfeño compra todos los años varias series de lotería. Este año pidió a la encargada de la administración de lotería El Calvario, de Granadilla de Abona, que le consiguiera el número 79.712, que estaba en Alicante. Las series se han vendido décimo a décimo en las gasolineras del grupo, situadas en Adeje, Arico, Granadilla, San Miguel, Arafo, Geneto y La Laguna. Los 96 empleados de todas las gasolineras de su empresa, los cinco del grupo de transporte y combustible y los tres de venta directa, así como los cinco trabajadores de Onda Tenerife, han resultado premiados.

Este domingo han sido muchos los que se han acercado a la estación de Repsol en San Isidro. Una de ellas es Isabel Ruiz, de 40 años, que compró un décimo del segundo premio. Trabaja en una planta de reciclaje de envases en el vertedero de Arico, tiene 4 hijos, y uno de ellos en paro, y destinará el dinero a comprarse una casa porque vive de alquiler, así como a ayudar a su familia porque tiene 12 hermanos y muchos también están en paro.

"Voy a ver el mundo entero"

Jorge Gorrín, otro de los agraciados, pero este con tres décimos, ha asegurado: "Me parece que voy a ver el mundo entero". Repite fortuna porque hace unos siete años le tocaron 1,8 millones de euros en el sorteo de la ONCE.

Inmaculada Delgado, de 37 años, es otra de las afortunadas que se ha acercado a la gasolinera de San Isidro nada más conocer que le había tocado el número que siempre compra, el 12, porque ella y sus dos hijas mellizas nacieron el 12 de enero.

Jesús Lorente, uno de los afortunados que había comprado un décimo ganador, se encontraba como público en el Teatro Real, donde ha vivido con emoción su golpe de suerte. El joven de 27 años y empleado del sector de la hostelería había viajado a Madrid para pasar las navidades con su familia.