Los 'play-offs' de la NBA

Luka Doncic se postula para el anillo de la NBA

Una nueva exhibición del genio de Liubliana, con 35 puntos, 10 rebotes y 4 asistencias, impulsa a los Mavericks a la final del Oeste tras aplastar a los Suns

Doncic Dallas Mavericks

Doncic Dallas Mavericks / Christina Petersen / AFP

Luis Mendiola

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Solo tiene 23 años. No deja de estar en los primeros pasos de una asombrosa carrera. Pero Luka Doncic aparece sobradamente preparado para alcanzar el siguiente nivel de la excelencia en la NBA y llevar a los Dallas Mavericks a la pelea por el anillo de campeón. De momento, ya están en la final de la Conferencia Oeste, donde se encontrarán con los renacidos Golden State Warriors de Stephen Curry y Klay Thompson, después de destrozar a domicilio en un séptimo partido de los Phoenix Suns, el equipo con el mejor balance de la temporada, finalista hace un año de la NBA, que fue una sombra de sí mismo.

El genio de Liubliana lanzó a los suyos con 33 puntos (6 de 11 triples), 10 rebotes y 4 asistencias en el séptimo partido frente a los Suns y los Mavs completaron el partido soñado para imponerse por 33 puntos (123-90) la quinta máxima diferencia para un séptimo partido en la historia, aunque las diferencias llegaron a situarse por encima de unos sonrojantes 40 puntos en algunos momentos.

“Nadie me va a quitar la sonrisa de la cara, me siento realmente feliz”, aseguró Doncic, después de una paliza que apenas tiene precedentes y que demostró de qué pasta está hecho el esloveno. Los Mavs necesitaban dos victorias consecutivas para evitar la eliminación y la estrella de Dallas entregó en esos dos partidos 68 punto, 21 rebotes y 12 asistencias, para abrirle las puertas de la final del Oeste por primera vez desde el 2011, cuando ganó el título con Dirk Nowitzki, mentor de Doncic, y presente en Phoenix, con el que se fundió en un abrazo nada más concluir el encuentro.

Tantos puntos como los Suns

“Creo que nos lo merecemos. Hemos estado jugando muy duro en todas la series. El equipo ha creído. Todo el mundo ha creído, así que no puedo estar más feliz”, dijo. Al descanso, Doncic ya sumaba 27 puntos, los mismos que todo Phoenix, cuyos jugadores ya fueron abucheados al irse al vestuario. '¿Te distes cuenta de ese dato? ' le preguntaron los periodistas en la sala de prensa. “Sí, claro que me di cuenta”, dijo complacido.

Los Mavericks llegan como una auténtica sorpresa a la final del Oeste con los Warriors que empezará a disputarse en la madrugada del próximo viernes y, en gran parte, se debe al autoritario dominio que ejerce Doncic en la pista, uno de los cinco mejores en la lista del MVP esta temporada, pero seguramente ya para muchos el mejor de la Liga. 

“Es Luka, le encanta estar en el centro del escenario. Cuanto más grande, mejor juega”, lo elogió el técnico de los Mavs, Jason Kidd. Hace un año, con los Clippers eliminaron a Dallas en el séptimo partido, Doncic acabó con 46 puntos y 14 asistencias y su promedio de anotación en los ‘play-offs’ (32,5) ya rivaliza con los de Michael Jordan (33,4 puntos). Sun influencia y su talento no paran de crecer.

“No fui yo, fue una cuestión de todo el equipo. Fue increíble cómo jugamos. No recuerdo una actuación así de nadie en un séptimo partido. Y nosotros los hicimos. Por eso estoy tan orgulloso”, dijo con modestia Doncic, cuyos promedios en estas series semifinales de 32,6 puntos , 9,9 rebotes y 7 asistencias lideran las tres categorías entre los jugadores de Dallas y Phoenix. 

La forma en la que controla los partidos, el ilimitado repertorio ofensivo del que dispone, capaz de lanzar desde larga distancia, driblar, penetrar, o postear contra cualquier defensor, le convierten en alguien imparable. Aunque el mejor as que guarda en la manga es su frialdad en los partidos de máxima presión. 

“Vive para estos momentos”, admitió el base Jalen Brunson, que sumó 24 puntos en el partido. “Es el tipo de jugador que quiere darte el puñetazo del KO”, admitió también su compañero Spencer Dinwiddie. 

Luka lo demostró con el Madrid al que llevó al título de la Euroliga. Con Eslovenia, a la que condujo al título europeo y a la pelea por las medallas en los Juegos de Tokio. Y, ahora, con los Mavericks, que sueñan con el trono de la NBA.