Violencia política

Detenido un hombre con una bomba que quería matar al líder de ultraderecha de Portugal

El ascenso meteórico de Chega, el partido ultra portugués

El líder de la extrema derecha en Portugal, André Ventura, da la mano a la ultra francesa Marine Le Pen y al alemán Tino Chrupalla.

El líder de la extrema derecha en Portugal, André Ventura, da la mano a la ultra francesa Marine Le Pen y al alemán Tino Chrupalla. / Jose Sena Goulao / EFE

EFE

EFE

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

 Un hombre con un artefacto explosivo ha sido detenido el jueves en la sede del partido de ultraderecha portugués Chega en Lisboa, donde presuntamente quería matar al líder de la formación, André Ventura. Una fuente de la Policía de Seguridad Pública ha confirmado el arresto y ha agregados que podría tratarse de un caso de "salud mental" y que el sospechoso está siendo examinado en un hospital.

Por su parte, Ventura, que este jueves se encuentra en Funchal, la capital del archipiélago de Madeira, donde se celebran actos de campaña de cara a las elecciones regionales de este domingo, dijo a la prensa que había sido informado de que "alguien había entrado o intentado entrar" en la sede de su partido. "Tengo muy poca información porque me lo notificaron ahora que venía aquí, al centro de Funchal, que alguien había entrado o intentado entrar en nuestra sede y que dijo que llevaba un artefacto explosivo y que quería matarme", señaló Ventura.

Refuerzo de la seguridad

El dirigente de ultraderecha añadió que la policía ha establecido un "perímetro" de seguridad alrededor del edificio de su partido en Lisboa y en el Parlamento, que se encuentra en las proximidades.

"Esto es una amenaza de bomba y no tengo mucha más información", indicó Ventura, quien anticipó que va a evaluar con la policía si hay más riesgos para su seguridad o si se trata de una situación aislada.

"Es lamentable que esta escalada de violencia pueda continuar -subrayó- y vamos a reevaluar nuestra propia seguridad que tenemos en la sede".

Este suceso se produce después de que el pasado 15 de mayo, un hombre de 71 años disparara contra el primer ministro eslovaco, Robert Fico, nacionalista de izquierdas, en la localidad de Handlová, en el centro del país, donde resultó herido grave