La Cámara de Representantes de EEUU aprueba por fin la ayuda financiera a Ucrania, Israel y Taiwán

No hubo sorpresas, ni tampoco inesperados giros dramáticos de última hora. Con varios meses de retraso, la Cámara de Representantes de EEUU ha aprobado finalmente este sábado, de forma separada y por una amplia mayoría, los paquetes de ayuda financiera destinados a Ucrania, Israel y Taiwán, tres países aliados de EEUU que afrontan conflictos armados o presiones y amenazas de parte de sus vecinos, por un montante total de 95.000 millones de dólares. El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, se deshizo en agradecimientos y parabienes en cuanto se confirmó la noticia. "Esta ley vital aprobada hoy por la Cámara de Representantes ayudará a impedir que la guerra se expanda, salvará miles y miles de vidas y ayudará a nuestras dos naciones a ser más fuertes", celebró el mandatario.

Su homólogo norteamericano Joe Biden también quiso expresar su satisfacción, al tiempo que subrayó la gravedad del momento. En un comunicado emitido por la Casa Blanca, Biden ha considerado que (el paquete financiero) "llega en un momento de gran urgencia, con Israel afrontando ataques sin precedentes desde Irán y Ucrania bajo bombardeo constante de Rusia". Todo el borrador será ahora enviado al Senado para ser sometido a votación la semana que viene, aunque nadie duda de que recibirá el visto bueno de la Cámara alta, donde el Partido Demócrata detenta la mayoría. Finalmente, el texto legal será remitido a la Casa Blanca para luego ser rubricado por Biden y promulgado finalmente.

Las partidas financieras, de 60.840 millones correspondientes a Ucrania, 26.000 millones a Israel y 8.120 millones a la región del Indo pacífico, incluyendo a Taiwán, se votaron de forma separada y obtuvieron una cómoda mayoría, incluyendo la destinada a Kiev, la que mayor controversia había generado: 311 votos a favor por 112 en contra, todos ellos pertenecientes al ala más radical del Partido Republicano. Su representante más vocal, la conspiracionista Marjorie Taylor Greene, elegida en uno de los 14 distritos del estado de Georgia, una mujer que durante los últimos meses no ha escondido sus maniobras para evitar que la ayuda a Ucrania viera finalmente la luz, apenas ocultaba su indignación, y advertía al speaker de la cámara, Michael Johnson, que sus días estaban contados. "El señor Johnson es un muerto viviente; está acabado", amenazaba. Que Ucrania es para la formación conservadora un tema tóxico, que genera importantes divisiones en sus filas, es un hecho que ha quedado fielmente reflejado en la votación sobre la partida dedicada a Kiev: 112 legisladores de esta formación votaron en contra, una cifra superior a los 101 que lo hicieron a favor.

Por contra, representantes del Partido Demócrata, la formación política rival, mostraron banderas ucranianas durante la sesión, lo que mereció la reprobación del presidente de la asamblea Michael Johnson, quien tachó el gesto de "falta de decoro".

Sin celebraciones en Moscú

En la capital rusa, los voceros habituales del Kremlin tampoco estaban para demasiadas celebraciones, al igual que muchos legisladores ultraconservadores de EEUU. En una primera reacción, Dmitri Peskov, portavoz del presidente Vladímir Putin, dio a entender que la aprobación de la ley solo arruinaría "aún más" a Ucrania, provocando más muertes debido a la continuación de la guerra. El funcionario también arremetió contra otra provisión legal aprobada por la Cámara baja norteamericana: la posibilidad de que activos congelados rusos en EEUU sean confiscados y entregados a Ucrania para ayudar en la reconstrucción del país. En su opinión, tal posibilidad "dañará" la imagen de Washington en el mundo y provocará inevitables represalias económicas desde Rusia.

De los más de 60.000 millones de dólares que recibirán las autoridades de Kiev, como mínimo cerca de 26.000 ni siquiera saldrán de las fronteras de EEUU y se dedicarán a la adquisición de armamento norteamericano para el Ejército ucraniano, en un momento bélico delicado para Kiev, tanto en las líneas de frente como en las ciudades de la retaguardia, bombardeadas recurrentemente por el Ejército ruso. En la partida israelí, también se incluye la suma de 9.100 millones de dólares destinados a ayuda humanitaria para los palestinos. Pese a que la defensa del Estado hebreo genera mucho más consenso entre los congresistas que la de Ucrania, también fue posible identificar algunas fisuras, circunstancia que se reflejó en el número de votos negativos que obtuvo: 56. Entre las filas demócratas, crecen las críticas a la actuación del Ejército israelí en Gaza y al elevado número de muertos producto de la ofensiva.

La OTAN y la UE

En la orilla oriental del océano Atlántico, los líderes de la OTAN y de varias instituciones de la Unión Europea se unieron al coro de celebraciones entre la oficialidad norteamericana. "Celebro que la Cámara de Representantes haya aprobado un nuevo e importante paquete de ayuda para Ucrania. (...) Esto nos hace estar más seguros a todos, en Europa y Norteamérica", ha declarado el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg.

"Este importante aumento de la ayuda complementará las decenas de miles de millones de ayuda que los aliados europeos están proporcionando a Ucrania", añadió en X. Stoltenberg hacía referencia al acuerdo alcanzado el viernes por los ministros de Defensa de la Alianza Atlántica para proporcionar más apoyo militar a Ucrania, incluida para su defensa aérea.

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, también acogieron con satisfacción la aprobación de la ayuda. "Ucrania merece todo el apoyo posible contra Rusia. Los aliados transatlánticos están unidos en apoyo de la libertad y la democracia", declaró von der Leyen en X. La votación envió "un mensaje claro al Kremlin: quienes creen en la libertad y en la Carta de la ONU seguirán apoyando a Ucrania y a su pueblo", escribió por su parte Michel.