Maduro se allana el camino a la reelección con el bloqueo a Corina Yoris como candidata de la oposición

El madurismo se salió finalmente con la suya. Primero excluyó del proceso electoral a la conservadora María Corina Machado, amparado en un pronunciamiento del Supremo Tribunal de Justicia (STJ). En la noche del lunes le tocó probar la misma medicina a su sustituta, Corina Yoris, ungida de emergencia como candidata de la Plataforma de Unidad Democrática (PUD) para las presidenciales del 28 de julio. Sobre la académica no caía ninguna proscripción pero no pudo inscribirse en Consejo Nacional Electoral (CNE). El sistema informático se lo impidió pero una razón mayor se escondió detrás de las razones técnicas. De una Corina a otra, Venezuela a entrado en un escenario temido pero también contemplado de antemano: Nicolás Maduro ha creado las condiciones para acercarse a una nueva reelección.

La PUD denunció ante "todos los venezolanos y al mundo" el impedimento. "Nunca se nos ha permitido tener acceso" para registrar a Yoris ante el organismo. "Hemos agotado todos los medios a nuestro alcance para que esto se pueda resolver". Según la propia aspirante, no solo "están cercenando" su derecho a participar de las elecciones "sino el de millones de venezolanos que le dieron el triunfo a María Corina" en las primarias de octubre.

Machado reconoció la frustración. "Es una verdad dura la que tenemos que aceptar hoy". Aseguró, no obstante, que la sociedad venezolana sabe "que hemos hecho todo para cumplir el mandato" de las primarias del 22 de octubre, que ella ganó con el 90% de las adhesiones. Ahora, "el régimen se quitó la careta y se puso de acuerdo con sus cómplices" para impedir la inscripción de la candidata de la PUD y tener rivales a su medida. "Así de débil estará que se niega a medirse con una académica de 80 años". A pesar de ese impedimento, "la verdadera oposición hoy está más unida". Según Machado, "la comunidad internacional ya no tiene más excusas" porque lo sucedido "es demasiado burdo y grotesco". El Gobierno de izquierdas de Colombia se hizo eco de ese reclamo y consideró que los recientes acontecimientos "pueden afectar a la confianza de algunos sectores de la comunidad internacional en la transparencia y competitividad del proceso electoral". El Brasil de Luiz Inacio Lula da Silva hizo lo propio. "Sobre la base de la información disponible, constata que se impidió la inscripción del candidato propuesto por la Plataforma de Unidad, fuerza política de oposición, y sobre el que no existía ninguna resolución judicial, lo que no es compatible con los acuerdos de Barbados. El impedimento no ha sido objeto hasta ahora de ninguna explicación oficial".

Reacción oficial

La cancillería venezolana reaccionó de manera previsible ante los señalamientos y dijo que ambos comentarios parecían "dictados" por Washington. Maduro, de esta manera, abre una fisura con dos de los Gobierrnos más cercanos de la región. Más tarde se pronunció Maduro en términos más duros: "Callan los Gobiernos de derecha, callan los Gobiernos cobardes (…) No son capaces de condenar". Y añadió: "El que venga a opinar y a inmiscuirse en los asuntos internos de Venezuela, recibirá su tablazo. Llámese Unión Europea, derecha cobarde, a tablazo puro. Hemos hecho respetar a Venezuela en las peores circunstancias y vamos hacer respetar la soberanía del pueblo. No se equivoquen con nosotros".

El Gobierno de ultraderecha de Argentina informó en tanto que seis antimaduristas fueron acogidos por la embajada en Caracas y que le fue cortado el suministro de electricidad a la residencia.

La disyuntiva

La oenegé Programa Venezolano de Educación-Acción en Derechos Humanos (Provea) aseguró que el CNE "ha incautado de forma inconstitucional, el derecho de la ciudadanía a elegir libremente el destino del país". El exrector de ese organismo, Enrique Márquez, no tuvo esas limitaciones y se inscribió este lunes como candidato, pero al margen de la PUD. "Queremos representar al pueblo venezolano que sufre", dijo. Manuel Rosales, gobernador del estado petrolero de Zulia (al oeste de la capital), rival de Hugo Chávez en los comicios de 2006 y opositor moderado a Maduro, lo hizo también a las 11.59 del lunes, cuando faltaba un minuto para que cerrara el plazo establecido.

Rosales fue muy criticado por la PUD ya que no participó en las primarias. Su partido, Un Nuevo Tiempo (UNT), defendió la decisión del gobernador de inscribirse a última hora. De no haberlo hecho, "las fuerzas opositoras se encaminaban a quedar fuera de la carrera electoral y algo en lo que hemos sido claros y firmes es que la abstención no es opción". El CNE informó que ha logrado inscribir su tarjeta Edmundo González Urrutia en nombre de el Movimiento de Unidad Democrática (MUD), la coalición que derrotó al Gobierno en las parlamentarias de 2015 y de la cual forman parte varios de los partidos de la PUD.

En 2018, ese sector de la oposición se abstuvo de participar de los comicios y allanó el camino de la reelección de Maduro. Esta vez, y para no repetir lo que en perspectiva se ha considerado un error táctico, buscó encontrar una fórmula de consenso para derrotar en las urnas a un jefe de Estado que, intuye, carece de popularidad debido a la profunda crisis social que atraviesa el país. Esa hoja de ruta se encontró ineficaz. La PUD se enfrenta por estas horas a la disyuntiva de calificar de fraudulenta la elección o respaldar de mala gana a uno de los contendientes habilitados. Henrique Capriles, quien fue derrotado por Hugo Chávez en las elecciones de 2012 y por Maduro un año después, tras la muerte del bolivariano, y ha sido inhabilitado al igual que Machado para participar en este proceso, llamó a no repetir antiguos tropiezos y avalar a cualquier "opción" que, aun bajo las actuales circunstancias, pudiera derrotar al Palacio de Miraflores a través del voto. Las alternativas, a estas alturas, son Rosales, Márquez y González Urrutia o una nueva desafección que le entragaría en bandeja la victoria al Gobierno.

De acuerdo con el portal Efecto Cocuyo para la oposición el desafío de superar las diferencias y trazar conjunto una estrategia que permita "colarse" por las rendijas del sistema electoral, que, se reconoce, son mínimas.

El analista político Luis Vicente León se preguntó cuál será la respuesta de Estados Unidos, "un actor clave en términos de impactos económicos sobre Venezuela", teniendo en cuenta "que su disposición a repetir el absurdo del interinato de 2019 es bajísima y que el regreso a la estrategia de máxima presión es demostradamente contraproducente". Hace cinco años, la administración de Donald Trump avaló que el diputado Juan Guaidó se autoproclamara "presidente encargado". La estrategia fracasó y Maduro retuvo el poder a pesar del desastre social.