Conflicto en Oriente Próximo

EEUU fortalece a Israel mientras la ofensiva en Gaza se recrudece y suma ya 1.400 muertos

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El secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, y el primer ministro israelí, Binyamín Netanyahu, este jueves en Tel Aviv.

El secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, y el primer ministro israelí, Binyamín Netanyahu, este jueves en Tel Aviv. / JACQUELYN MARTIN / POOL / REUTERS

Andrea López-Tomàs

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Estados Unidos se vuelca con Israel. A medida que se recrudece la ofensiva israelí sobre Gaza, que ya arrasa barrios enteros y mata a más de 150 palestinos en un solo día, la Administración del presidente estadounidense Joe Biden ha escenificado su apoyo total al mismo Ejército que ha lanzado 6.000 bombas sobre el enclave en apenas seis días. "El mensaje que traigo a Israel es que puede que seáis suficientemente fuertes para defenderos por vuestra cuenta, pero mientras Estados Unidos exista, nunca tendréis que hacerlo", ha dicho este jueves el secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, de visita en Israel. "Estaremos siempre ahí a vuestro lado", ha constatado.

Por su parte, el primer ministro israelí, Binyamín Netanyahu, ha hecho una dura advertencia a la milicia palestina que el sábado lanzó un ataque sorpresa sobre Israel que se ha cobrado más de 1.200 vidas. "Tal como el Estado Islámico (EI) fue aplastado, será aplastado Hamás, y Hamás debería ser tratado exactamente del mismo modo que fue tratado el EI", ha declarado en la rueda de prensa ofrecida junto a Blinken. Según el diplomático estadounidense, al menos 27 estadounidenses han fallecido en Israel como consecuencia del ataque de Hamás. El grupo islamista, que controla la Franja de Gaza, no ha cometido esos "actos atroces con los intereses del pueblo palestino en mente", ha dicho. "No hay ningún pretexto para estos actos horrendos", ha destacado, antes de visitar un centro de voluntarios en Tel Aviv.

"Hospitales convertidos en morgues"

Mientras, el silencio de la Administración Biden sobre los palestinos es ensordecedor. Biden únicamente le ha pedido al país hebreo que "respete las leyes de la guerra" en Gaza. Pero, en la Franja, ya han muerto al menos 1.417 personas en seis días. La mitad de los asesinados son mujeres y niños. En total, 447 menores han perdido la vida por los bombardeos. Los hospitales, "a punto de convertirse en morgues" por el apagón impuesto por Israel, intentan salvar a más de 6.000 heridos, de acuerdo a fuentes oficiales palestinas. Es imposible describir la desolación del pueblo gazatí en palabras mientras son testimonios del exterminio de sus gentes y la destrucción de sus barrios. El Ejército israelí ha afirmado haber lanzado unas 6.000 bombas que pesan 4.000 toneladas en estos seis días sobre la Franja de Gaza, y haber alcanzado 3.600 objetivos.

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A la vez que Blinken promete más ayuda militar al potente Israel, los palestinos del enclave temen que estas sean sus últimas horas con vida. Los grupos de derechos humanos han pedido el establecimiento de "corredores humanitarios", pero la Franja sigue bajo total asedio. Israel ha avisado a Hamás de que no habrá electricidad ni comida hasta que liberen a todos los rehenes, cuyas cifras oscilan entre 100 y 150 israelíes y de otras nacionalidades. Egipto y Jordania están intentando mandar vuelos humanitarios hacia Gazaa para que entren por el cruce de Rafah con el país de los faraones, pero los ataques israelíes sobre este punto de entrada no se detienen. 

Ataques de colonos

Además, la situación cada vez es más tensa en la Cisjordania ocupada, donde los colonos han atacado al funeral de los tres palestinos que asesinaron el miércoles y han matado a un padre y a su hijo mientras intentaban apartar los neumáticos que los radicales habían colocado para detener la procesión fúnebre. Desde el sábado, al menos 31 palestinos han sido asesinados.

En Israel, han vuelto a caer cohetes en las localidades sureñas de Sderot, Ashkelon y Ashdod. El líder de la oposición y jefe del partido Yesh Atid, Yair Lapid, ha confirmado que su partido no se unirá al Gobierno de emergencia en tiempos de guerra establecido con Benny Gantz y Netanyahu porque “no funcionará y sólo aumentará el desorden”, después de haber puesto como condición que los partidos de derecha no estuvieran.

Aún se han dado algunos intercambios de disparos cerca de comunidades fronterizas de Gaza y el área de búsqueda del Ejército israelí. En el norte, han vuelto a sonar las sirenas en localidades cerca del Líbano. Entre bombardeos y destrucción, los palestinos sienten que el mundo les da la espalda. Francia ha prohibido las protestas pro-palestinas alegando que "es probable que generen alteraciones del orden público". En el Reino Unido, la ministra del Interior, Suella Braverman, alegó hace dos días que ondear una bandera palestina en las calles británicas "puede que ya no sea legítimo" si se considera una muestra de apoyo a los actos de terrorismo. Bajo la gris humareda, bajo los llantos, Gaza languidece más sola que nunca.

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