Represión egipcia

Las autoridades egipcias ponen bajo "tratamiento médico" al preso político en huelga de hambre y sed

La familia denuncia que las autoridades no les dan permiso para visitarlo

Hermana de Alaa Abdel Fattah

Hermana de Alaa Abdel Fattah / Europa Press

EFE

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El destacado activista prodemocracia egipcio-británico Alaa Abdel Fattah, en huelga de agua desde el inicio de la COP27 el pasado domingo y en huelga de hambre desde hace más de 200 días, ha sido puesto en "tratamiento médico" por las autoridades, denuncia su hermana Mona Seif a través de sus redes sociales.

"Alaa está bajo tratamiento médico, con el conocimiento de las autoridades judiciales", informa Mona en un mensaje, en el que dijo que su madre fue quien recibió esta información al tiempo que fue obligada a abandonar la vigilia que mantiene junto a la prisión donde se encuentra detenido su hijo. "¿Cómo es que no nos informaron a nosotros y a los abogados? ¿Cómo es que no podemos ver a Alaa nosotros mismos?", se pregunta la hermana.

Desde que el activista comenzó su huelga de sed no hay noticias sobre su estado de salud y su familia no ha recibido permisos para verle o comunicarse con él por escrito. La frágil situación de Alaa está siendo uno de los temas centrales de esta COP27, que se está celebrando en Egipto, cuyas autoridades se comprometieron a que su seguridad será "preservada" ante actores políticos internacionales que han mostrado su interés por la liberación del activista prodemocracia.

Protagonista de la COP27

"Sabemos que el Gobierno egipcio se alegraría de su muerte, pero no quiere que suceda cuando el mundo está mirando. Pero el mundo está mirando", indica Sanaa Seif, otra de las hermanas del prisionero que está presente en la COP27. El caso de Adbel Fattah ha robado el protagonismo de la cumbre climática, donde representantes de destacadas oenegés, como Amnistía Internacional (AI) o Human Rights Watch (HRW), han actuado activamente para denunciar ante las audiencias globales esta situación.

El alto comisionado para los derechos humanos de la ONU, Volker Türk, pidió esta semana la liberación del activista, calificó de "injusta" su prisión y expresó su alarma ante la posibilidad de que éste hubiera fallecido, lo que derivó en una airada protesta diplomática egipcia.

Desde que Al Sisi asumió el poder en 2013, Alaa Abdelfatah ha permanecido gran parte del tiempo entre rejas, ha cumplido una condena de cinco años por organizar una protesta y en 2021 fue sentenciado otra vez a cinco años por "difundir noticias falsas".