Crisis en el Reino Unido

Dimite la ministra británica de Interior, Suella Braverman

El exministro de Transportes Grant Shapps la reemplaza en el cargo

La renuncia tiene lugar en un momento de crecientes presiones para que la primera ministra abandone Downing Street

La dimitida ministra del Interior del Reino Unido, Suella Braverman.

La dimitida ministra del Interior del Reino Unido, Suella Braverman. / TOBY MELVILLE

Begoña Arce

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La ministra británica de Interior, Suella Braverman, ha dimitido este miércoles después de haber asumido el cargo hace tan sólo 43 días, convirtiéndose en la ministra de Interior más breve en la historia reciente del Reino Unido. Braverman ha sido sustituida por el exministro de Transportes, Grant Shapps, que en la última elección de líder conservador apoyó a Rishi Sunak, el rival de Liz Truss en las primarias 'tories'.

En su carta de renuncia, Braverman afirma que a primera hora del miércoles había enviado a un colega del Parlamento un documento oficial desde su cuenta de correo personal sobre inmigración. "Eso constituye una infracción técnica de las normas", señala. "Tan pronto como me di cuenta del mismo alerté inmediatamente de lo ocurrido por los canales oficiales". En otro fragmento de su misiva, Braverman suelta claramente una indirecta a Truss: "La actuación del Gobierno se basa en que la gente asume la responsabilidad por sus errores, pretender que no hemos cometido errores  y seguir adelante como si los demás no se hubieran dado cuenta y esperando que las cosas vuelvan mágicamente a estar bien no es una política seria. He cometido un error, acepto la responsabilidad, renunció".

La carta va más allá en las críticas. "Es obvio para todo el mundo que atravesamos tiempos tumultuosos. Me preocupa la dirección de este Gobierno. No solo hemos rotos las promesas fundamentales que hicimos a nuestros votantes, me preocupa además muy seriamente el cumplimiento de los compromisos que este Gobierno prometió en su programa, como el reducir el número de migrantes y detener la inmigración ilegal particularmente peligrosa en el cruce (del Canal de la Mancha) en pequeños botes".

Braverman, cuyas ideas y declaraciones pertenecen abiertamente al ámbito de la extrema derecha, podía haber tratado de minimizar su error "técnico". Por el contrario, lo ha magnificado con su renuncia y sus comentarios críticos, ahondando aún más la crisis en la que se halla la primera ministra, cuando Truss lucha desesperadamente por sobrevivir.

Presiones crecientes

La renuncia se produce entre crecientes presiones dentro del Partido Conservador para que la primera ministra abandone Downing Street, después de la tormenta financiera y el desplome en las encuestas que provocó su masivo recorte de impuestos, un plan que se vio forzada a retirar. Ese giro rotundo la obligó a cesar al ministro de Finanzas, Kwasi Kwarteng, tras los destrozos causados por su estrategia para fomentar el crecimiento económico. Esta semana, el sustituto de Kwarteng, Jeremy Hunt, revertió las medidas puestas en marcha, acabando con la visión económica de la primera ministra.

Los movimientos en el gabinete se producen después de que un sexto diputado 'tory' pidiera este miércoles públicamente en el Parlamento la dimisión de la primera ministra. El conservador William Wragg dijo ante la Cámara de los Comunes que se siente "avergonzado por no poder mirar a la cara a los votantes" tras el caos económico desatado por las medidas de Truss.