Las estudiantes ya no los pagan

Escocia será el primer país que ofrecerá gratis productos menstruales

El Parlamento votó por unanimidad a favor de un proyecto de ley que establece ese derecho legal

Compresas

Compresas / CARLOS MONTAÑÉS

Begoña Arce

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En la película de Ken Loach, ‘I, Daniel Blake’, a una madre joven y sola, sin un penique en el bolsillo, la pillan robando compresas en un supermercado. En esa escena el público se percató de golpe de un problema vergonzoso del que nadie hablaba demasiado. Incluso en los países más ricos muchas mujeres no tienen los medios para comprar los productos que necesitan cada mes para la menstruación. El film, Palma de Oro del Festival de Cannes, se estrenó en el 2016, el año en que la diputada laborista en el Parlamento autonómico escocés, Monica Lennon,  inició la campaña contra la llamada "pobreza del periodo". El martes Escocia se convirtió en el primer país  del mundo que va a ofrecer gratis a las mujeres productos sanitarios para la menstruación.La medida fue aprobada por unanimidad.

 La primera ministra escocesa, Nicola Sturgeon, celebró la decisión. "Orgullosa de votar por esta ley revolucionaria, que convierte a Escocia en el primer país en el mundo que provee productos menstruales gratuitos a todas aquellas que lo necesitan". "Una política importante para mujeres y niñas", añadió.

Las autoridades locales escocesas tendrán a partir de ahora la obligación legal de proporcionar, tampones y compresas a "cualquiera que lo necesite" en escuelas, universidades y otros lugares públicos. En algunos de estos sitios ya se venían distribuyendo, con la aportación de 5.2 millones de libras (5.8 millones de euros) del gobierno escocés a onege, FareShare.  Ahora se pondrán a disposición de 32 autoridades locales encargadas de decidir la forma práctica de distribución de los productos otros 4.5 millones euros más. Otros 56.000 euros servirán para para aprovisionar clubs deportivos. Se estima que el coste total será de unos 11 millones de euros al año.

"Todos estamos de acuerdo en decir que nadie debería preocuparse por sus próximos tampones o protecciones reutilizables", declaró  Lennon en el Parlamento. "Escocia no será el último país en relegar [la falta de acceso a productos menstruales] a la historia pero tenemos la oportunidad de ser el primero. Ha sido un largo camino". Lennon considera la nueva normativa "más importante que nunca", porque "el periodo no se detiene con las pandemias". Añadió que las escuelas deben ofrecer además "educación sobre la menstruación" a todos los alumnos, para "acabar con el estigma" de los periodos. 

Los tampones y compresas son gratis para estudiantes de secundaria y universidad en Escocia, pero el proyecto de ley impone ahora a los ministros la obligación de establecer un plan a nivel nacional para garantizar un acceso universal. Escuelas, colegios y universidades también deben poner a disposición una gama de productos para la menstruación en sus aseos. El Gobierno escocés podrá obligar a organismos públicos a proveer gratuitamente estos productos.

Aileen Campbell, secretaria para las comunidades y el Gobierno local, considera que la ley envía un "importante mensaje sobre el tipo de país que Escocia quiere ser".

"Es una Escocia [...] donde nadie tiene que pasar por la indignidad de utilizar materiales inadecuados para ocultar su periodo o estirar aún más el presupuesto familiar para comprar productos a sus hijos [...] una Escocia donde nadie tiene que esconder un tampón bajo la manga".