La oposición se aviene a participar en el diálogo sobre Siria

En tiempo ya de descuento, la oposición se ha avenido a participar en las primeras negociaciones de paz en dos años sobre la guerra de Siria que se celebran en Ginebra. El Comité Supremo para las Negociaciones (CSN) de la oposición siria participará, finalmente, en las conversaciones que han empezado el viernes en la ciudad suiza entre la ONU y el régimen sirio tras una negativa inicial condicionada a obtener garantías del cumplimiento de sus demandas.

Tras la negativa inicial, la CSN aseguró haber obtenido el compromiso del levantamiento del bloqueo de las ciudadades sirias asediadas, el suministro de ayuda humanitaria, el cese de los bombardeos y la liberación de detenidos.

El enviado especial de la ONU a Siria, Staffan de Mistura, ha empezado celebrando un único encuentro con la delegación del Gobierno del presidente Bashar el Asad. Su intención era entrevistarse con esta misión, encabezada por el embajador de Siria en la ONU, Bashar Jaafari, y mantener luego otra reunión similar con el Comité Supremo para las Negociaciones (CSN), que agrupa a los principales grupos políticos y armados de la oposición siria. Pero este último encuentro no llegó a celebrarse porque el CSN todavía no había decidido participar.

Con su boicot inicial, la oposición empezó desafiando a la ONU y a Washington, que había urgido a la oposición a aprovechar esta “oportunidad histórica”, sin precondiciones.

OFENSIVA EN DAMASCO

Los opositores a Asad, en cambio, dijeron estar mucho más preocupados por defenderse de una ofensiva militar, apoyada por Rusia, contra un suburbio de Damasco del cual están huyendo los civiles y que el Ejército sirio intenta reconquistar acabando de paso con la resistencia rebelde. El día anterior habían avisado de que no participarían en las conversaciones al no recibir respuesta sobre su exigencia de un alto el fuego como medida de buena voluntad. Una decisión que cambió a última hora.

“Es un fracaso absoluto”, declaró un diplomático occidental, bajo anonimato, describiendo la iniciativa de Mistura como una bendición para el Gobierno de Asad. “Está totalmente fuera de lugar", ha añadido, antes de que la situación diera un giro copernicano.

EL ROL DE HOLANDA

En La Haya, mientras, el Gobierno holandés ha anunciado que ampliará su rol en la coalición antiyihadista liderada por EEUU y participará en los bombardeos áereos contra el Estado Islámico (EI) en Siria. El escuadrón de seis F-16 holandeses estacionados en la región se limitaba hasta ahora a los ataques contra posiciones del EI en Irak.

Los cazas holandeses serán activos en el espacio aéreo de Siria hasta el próximo 1 de julio, según ha explicado el primer ministro holandés, Mark Rutte, y bombardearán a los yihadistas en operaciones de combate y campos de entrenamiento.