Por qué han de ganar (o perder) las 5 películas nominadas a los Premios Goya 2023

'Alcarràs', de Carla Simón

A favor: premiada en todo

Oso de Oro en Berlín, película seleccionada por la Academia española para competir en los Oscar, premios en los Gaudí y los Feroz… Son galardones y decisiones de considerable peso que, unido al notable éxito comercial, siendo una producción completamente independiente y sin intérpretes profesionales, convierten el segundo largometraje de Carla Simón en el candidato más firme del Goya a la mejor película. Quim Casas

En contra: una película sobreexpuesta

En los premios, hay un aspecto extracinematográfico que, de manera injusta, puede perjudicar a una película. Incluso si es la mejor de las nominadas. Se trata de la sobreexposición y de la impresión, por parte de los votantes, de haberla visto en todas partes. Desde que ganó en Berlín, ha secuestrado la atención de informadores, críticos y espectadores. Esa omnipresencia podría girarse en su contra. Desirée de Fez

'As bestas', de Rodrigo Sorogoyen

A favor: la trascendencia artística

El cine de Sorogoyen destaca por su capacidad para hacernos clavar las uñas en la butaca, pero ninguna de sus otras ficciones lo logra con tanta eficacia como esta. Es una película tensa como un alambre, que en todo momento transpira miedo, y rabia, y amenaza y paranoia, y entretanto exhibe más complejidad temática, más sofisticación formal y más trascendencia artística que cualquiera de sus obras previas. Nando Salvà

En contra: Sorogoyen frente al Oso (de oro)

A Sorogoyen siempre parece escapársele el reconocimiento de la Academia a la mejor película. Con 'El reino', ganó dos Goya, el de mejor director y guion, pero se quedó sin la categoría reina. Con 'As bestas' podría ocurrirle algo parecido, sobre todo en un año en el que las mujeres dominan las nominaciones, por lo que sería coherente que se premiara sus trabajos… sobre todo si han alcanzado un Oso de Oro de Berlín, una hazaña histórica para el recambio generacional de nuestra cinematografía. Beatriz Martínez

'Cinco lobitos', de Alauda Ruiz de Azúa

A favor: la sencillez de la emoción

Hacía tiempo que una película española no sintonizaba de una manera tan profunda con los espectadores. La ópera prima de Alauda Ruiz de Azúa ha conseguido el milagro de enamorar al público y todo gracias a la sencillez de una propuesta en la que lo importante son los sentimientos a través de las relaciones entre los personajes. B. M.

En contra: la neutralidad dramática

Pese a haber participado en el festival de Berlín y haber arrasado en Málaga, ‘Cinco lobitos’ queda un tanto empequeñecida por la presencia, en algunos casos estelar, del resto de películas en distintos certámenes. Tampoco juega a favor su neutralidad dramática, aunque sea en su ausencia de condescendencia donde mejor destaca. Q. C.

'La maternal', de Pilar Palomero

A favor: directa, muy emocional

Como en el caso de Carla Simón, Pilar Palomero se enfrentaba al duro reto de superar con la segunda película el listón alto colocado con la primera, ‘Las niñas’. Que aquel filme de debut ganará ya el Goya quizá le reste puntos, pero ‘La maternal’ tiene un estilo directo, emocional, casi documental, que acostumbra a gustar. Q. C.

En contra: repetición improbable

'Las niñas', ópera prima de Palomero, ya ganó el Goya a la mejor película hace solo dos años. No es imposible, pero es poco probable que el máximo galardón de la ceremonia vuelva a caer en tan poco tiempo (y con una propuesta no tan alejada de la anterior) en manos de la misma directora. D. d. F. 

'Modelo 77', de Alberto Rodríguez

A favor: el músculo de la industria

Alberto Rodríguez y su productor José Antonio Félez son un tándem imbatible en los premios Goya, como ya demostraron en La isla mínima. 'Modelo 77' es realmente la única película de carácter industrial dentro de las nominadas este año, por lo tanto, lo que constituye un plus para los académicos. Además, cuenta un episodio de la historia de nuestro país de manera impecable. B. M.

En contra: no es 'La isla mínima'

Se muestra mucho menos eficaz fusionando suspense y reflexión social que la película con la que Rodríguez ya se coronó en los Goya, ‘La isla mínima’, e incapaz de soportar el peso de su excesivo metraje, de todas sus elipsis y sus huecos argumentales, y de todas las explicaciones que sus personajes se ven obligados a dar. N. S.