Sara Carbonero: "Íker es buen paciente. No se queja"

La vida sigue y Sara Carbonero ha vuelto a sus labores de promoción a las que ya nos tiene un poquito saturados. Tras el susto vivido cuando su marido Iker Casillas sufría un ataque al corazón en pleno entrenamiento del Oporto, la colaboradora de Deportes Cuatro ha reaparecido en el hotel Destino Ibiza de blanco impoluto, con un traje de pantalón firmado por Elisabetta Franchi y top de Calzedonia, la firma de la que embajadora desde hace años.  

"Es muy buen paciente. No se queja demasiado. Por ahora no está dando nada de guerra. Está bien, tranquilo, relajado, en casa, recibiendo muchas visitas", ha explicado. El portero aún está "asimilando" lo que sucedió, "pero los médicos le han dicho que va a tener una vida 100% normal". 

La toledana, de 35 años, ha declarado que estas situaciones sirven "para relativizar las cosas y no enfadarse por tonterías". "Lo peor que podemos hacer en la vida es coger miedo. Hay que ser conscientes de que un día estás aquí y otro día no". , recalcaba. Sin embargo, esto no significa que vayan a "viajar o trabajar menos". 

Los hijos del matrimonio están siendo parte importante de esta recuperación. "Son una inyección de alegría en estos momentos. Los peques ayudan mucho, a animarte, a sonreír, son un chute de energía", ha explicado Sara, que ha disfrutado del desfile deCalzedonia junto a Paula Echevarría, Ariadne Artiles, Pepe Barroso y Yon González.