La gata Tara, del anonimato a la celebridad
El animal ha hecho el saque de honor en un partido de béisbol, mientras radios y televisiones se la disputan
En el estadio de Bakersfield (California, EEUU), la entrada era más cara de lo habitual sin tener nada que ver con el partido de béisbol. El motivo del incremento de precio era poder ver a la gata Tara, que se encargaba de hacer el saque de honor con la ayuda de su dueño.
Tara es la gata que ha acaparado toda la atención de los fotógrafos durante el saque de honor del partido debido a que hace unos días protagonizo un vídeo que ha dado la vuelta al mundo.
En el vídeo se podía ver cómo el pequeño Jeremy de la familia era atacado por el perro de un vecino mientras montaba en su triciclo mordiéndole en una pierna y siendo arrastrado por el perro. Pero cuando parecía que estaba todo perdido, aparece Tara, la gata de la familia, saltando encima de un perro mucho más grande que ella y evitando que el ataque a Jeremy no tuviera más consecuencias que unos pocos puntos de sutura.
Los propietarios de la gata ya bromean con hacer una serie sobre las nuevas aventuras de Tara debido a la gran demanda que tienen de los medios de comunicación, afirmaba su dueña, Erica Triantafilo. Tara, en cambio, se mostraba tranquila y mirando con sus ojos verdes a la mascota del equipo local.
- La FGE sustituye a la fiscal de Madrid por el fiscal superior de Extremadura en la querella de la pareja de Ayuso contra dos fiscales en su caso de fraude
- Este domingo puedes visitar el bosque del Prat que solo abre 10 veces al año
- 30 frases e imágenes para felicitar el Día de la Madre 2023
- Muere Carola Miró, la esposa del expresidente de la Generalitat Quim Torra
- ¿Qué supermercados triunfan más en Catalunya? La 'pole position' de la gran distribución alimentaria se distancia de su competencia
- Un muerto en un tiroteo al lado de la parada de metro de Maresme-Fòrum de Barcelona
- Catalunya se encomienda a las próximas lluvias y al deshielo para dejar atrás la emergencia por sequía
- El destino de Daniel Sancho se debate ahora entre la cárcel amable de Samui y la despiadada de Bangkok