Un Brasil anónimo, y sin seleccionador, juega el sábado en Barcelona ante Guinea

Está Brasil desde hace días en Barcelona. Y pocos lo saben. ¡Quién lo diría de la selección pentacampeona del mundo! Nadie tiene más estrellas cosidas junto al corazón que la ‘seleçao’, que anda desorientada y confusa porque hace años que perdió su identidad. Desde Corea y Japón cuando la triple R (Rivaldo, Ronaldo y Ronaldinho) holló la cima (2002), Brasil se ha enredado de tal manera que hasta sufrió el ‘Maracanazo’ del siglo XXI en su propio hogar cuando Alemania le inflingió un 7-1 en el Mundial 2014. Antes ya había sucedido en Alemania (2006), Suráfrica (2010) y después – Rusia (2018) y Catar (2022) – porque Brasil no era Brasil. Ni lo ha sido.

Por no tener, no tiene ni tan siquiera un seleccionador. Consumado el fracaso del último torneo, el quinto consecutivo, la ‘seleçao’ que se entrena en la intimidad de la ciudad deportiva del Espanyol está huérfana.

Brasil vestirá por primera vez de negro en protesta contra el racismo en el amistoso de Barcelona

No se entiende que Brasil, el coloso más grande que existe a nivel de selección por encima de Alemania, Italia o Argentina, la actual campeona del mundo con Messi, lleve ya más de seis meses sin entrenador.

Tras Tite, nadie...

Se fue Tite, al certificarse la caída en Doha, y no ha encontrado sustituto. Ancelotti, el técnico del Madrid, es el gran candidato. "Continuamos con nuestro plan A, que es exactamente Carlo Ancelotti. A ver si se da", aseguró Ednaldo Rodrigues, presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) al diario ‘O Globo’ a su llegada a Barcelona para acompañar a los jugadores y el cuerpo técnico interino dirigido por Ramon Menezes, técnico de la selección sub-20.

"Continuamos con nuestro plan A, que es exactamente Carlo Ancelotti. A ver si se da"

— Ednaldo Rodrigues, presidente de la CBF

Dispuesta está la CBF incluso a abrir la puerta de su templo a un entrenador extranjero, algo nunca visto antes, consciente de la profunda gravedad del problema. Ancelotti está en el primer lugar, pero no se descarta tampoco al portugués Jorge Jesús, mientras Abel Ferreira o Fernando Diniz son las opciones brasileñas que emergen para ocupar la silla vacía de Tite.

Se entrena Brasil en Barcelona preparando un amistoso que jugará este sábado en Cornellà-El Prat ante Guinea luciendo por vez primera un uniforme completamente negro en la primera mitad para rebelarse contra el racismo. Aprovecha la CBF las fechas FIFA, sin el lesionado Neymar, que debía ser la bandera exitosa y no lo fue, y con Vinicius, que fue una sombra de lo que es con el Madrid. El sábado, Barcelona; el martes, Lisboa contra Senegal.

"Soy el mayor responsable de este fracaso. No soy un hipócrita, pero hay parte de culpa para todos y mis jugadores también", dijo Tite al renunciar. Y la CBF no le halla seis meses después sustituto

Son dos Vinicius: uno brillante jugando en Europa; otro opaco y triste cuando defiende a su selección, transformado en la bandera de la lucha contra el racismo. Y con el 10, el místico 10 de Brasil, a la espalda.

Visita de Infantino a Vinicius

Hasta Gianni Infantino, presidente de la FIFA, estuvo en el hotel de la 'seleçao' en Barcelona, para reunirse con la estrella blanca. "Todos los clubs de Brasil y la gente de Brasil y del mundo entero que están conmigo me dan fuerza para seguir esta batalla", ha proclamado Vinicius.

"Era necesario tener alguien para mantenerse firme y disminuir el racismo", ha dicho Vinicius en una declaración oficial en la que se no aceptaron preguntas de los periodistas. "Yo quiero seguir por los jóvenes y todas las personas que sufren, pero no tienen la misma voz que yo", ha añadido.

"Era necesario tener alguien para mantenerse firme y disminuir el racismo"

— Vinicius, jugador de Brasil

Vinicius, que liderará un grupo de trabajo contra el racismo impulsado por la FIFA, y Rodrygo, su compañero en el Madrid, son los rostros de la esperanza para el interino Menezes, que ya debutó con derrota en el amistoso de marzo pasado ante Marruecos (2-1). En realidad, Brasil lleva un año buscando entrenador porque Tite ya anunció que dejaría el cargo tras el Mundial de Catar-2022, pasara lo que pasara.

Y pasó lo que pasó. Otro desastre más. "Soy el mayor responsable de este fracaso. No soy un hipócrita, pero hay parte de culpa para todos y mis jugadores también la han tenido porque no han rendido al nivel", afirmó el técnico en su marcha de la selección. Se fue dejando señales de donde estaba realmente el problema. 

Ha perdido la hegemonía

Tras Scolari y su familia en el 2002 ese banquillo ha sido una tortura. Parreira, Dunga, Mano Menezes, Scolari, de nuevo, Dunga, de nuevo, Tite... El drama de la 'seleçao' es más grande porque no solo ha perdido la hegemonía mundial sino también la continental, eclipsada por la Argentina de Scaloni y Messi.

La CBF, entretanto, no encuentra a nadie, provocando críticas de leyendas como Zico, que no entienden esa demora en la elección del técnico que debe guiar la reconstrucción del ‘futebol’.