Míchel opina que el Girona necesita ganar los tres partidos para ir a Europa

Entrar en la Conference League de la próxima temporada exige, para el Girona, ganar los tres partidos que quedan de Liga. Esos son los cálculos de Michel Sánchez, el entrenador blanquirrojo. El Girona tiene 48 puntos y por delante tiene al Athletic, el séptimo, con 50 puntos. "El listón estará en 56 puntos, ya que con 55 puede ser que no llegues", contemplaba el técnico madrileño. Asegurada la permanencia, el objetivo del grupo sigue siendo superar los 51 puntos del equipo de la temporada 2017-18 y clasificarse entre los diez primeros.

Después de la derrota con el Villarreal en el tiempo añadido, el vestuario siente "rabia", dijo Michel, asumiendo que los jugadores del Celta sienten una presión mayor porque la pesadilla del descenso ha reaparecido en Vigo después de una racha de malos resultados, con una victoria en las últimas ocho jornadas. "Luchar por bajar es más complicado para todo el mundo", admitió, sabiendo perfectamente de lo que habla.

Michel valoró el espíritu ofensivo del Celta, "un rival peligroso si tiene más la pelota que tú". El Girona, no obstante, es el cuarto equipo más goleador (55 goles), por detrás del Madrid (70), Barça (65) y Atlético (63), El Girona no podrá contar con el sancionado David López por acumulación de amarillas, ni tampoco con Rodrigo Riquelme, baja por unas molestias en la pierna izquierda, junto con Aleix, Toni Villa, Borja e Ibrahima Kébé. Reinier o Yangel Herrera pelean por su vacante. Por el contrario, recupera a Oriol Romeu, el mediocentro titular.

El Celta persiste con la incógnita de Iago Aspas, que arrastra una lesión en la espalda desde hace varias semanas y condiciona su rendimiento. La necesidad de ganar podría forzar su reaparición, sino de titular, sí en la segunda mitad. El ataque celeste, por tanto, estaría formado por Larsen y Seferovic. Se dan por seguras las reapariciones del capitán Hugo Mallo, que descansó en Bilbao, y el de Renato Tapia, que estuvo castigado.