La princesa Charlotte vuelve a vestir moda española en el funeral de la reina

Isabel II ya descansa en paz tras una despedida colosal que se ensayó durante años y paralizó a medio mundo. La histórica jornada de este lunes transcurrió con la emoción que merecía el momento en el que no faltaron los desfiles militares con soldados de brillantes uniformes, bandas de trompetas, tambores y melancólicas gaitas, oficios religiosos de hermosísimos coros y sermones laudatorios a la soberana desaparecida.

Carlos III y el resto de la familia real, incluidos algunos de sus miembros más jóvenes, fueron los indispensables protagonistas. Pero sin duda, la princesa Charlotte, la tercera de las hijas de los ya Príncipes de Gales, Guillermo y Catalina, ha vuelto a acaparar la atención de las cámaras por su solemne espontaneidad y por haber vuelto a elegir una firma de moda española para dar el último adiós a su bisabuela.

Charlotte ha acudido al funeral de riguroso negro. En su cabeza, un sombrero ancho con lazada en la parte de atrás y para abirgarse, un abrigo de lana de la firma española Ancar y unas bailarinas, también españolas, de Manuela de Juan Shoes. La pequeña de siete años lucía un broche en forma de herradura en el pecho que destacaba sobre el conjunto monocolor.

No es la primera vez que la princesa Catalina elige la moda española para vestir a sus tres hijos. Charlotte de Gales felicitó en agosto al equipo de fútbol femenino de Inglaterra con un tuit en el que aparecía junto a su padre, el príncipe Guillermo, y luciendo una camiseta 'made in Spain'.

La pequeña, de siete años, con la naturalidad que le caracteriza, vestía una camiseta de cuello redondo y manga corta, de canalé, en azul navy y con pequeñas flores redondas en blanco de la marca española Losan (10,95euros).