Emília Pallàs: «El trabajo contribuye a construir la identidad»

Barcelona Activa es un referente para muchas personas que hoy trabajan en el negocio propio que un día soñaron. Esta semana, muchas de ellas han cargado pilas con charlas, ideas y contactos en BizBarcelona. Emília Pallàs (Flix, 1958) es una de las profesionales que planea puentes hacia la ocupación. Lleva una vida haciéndolo. Empezó como psicóloga entrando en las tripas de realidades sociales difíciles, presentes aún en su labor actual no como obstáculo, sino como reto a superar de la mano de un empleo.

Si futuro sin trabajo no hay, y se habla de tantas profesiones en extinción, ¿Qué pasará?

Trabajo habrá siempre, en el sentido de aquellas actividades que hacemos para satisfacer necesidades. La cuestión será determinar cuáles de estos trabajos serán remunerados y permitirán ganarse la vida. Quizás lo más importante es garantizar ingresos para vivir con dignidad.

¿Qué ha cambiado desde sus inicios en el mundo de la ocupación?

Uno de los aspectos que más ha cambiado son las expectativas respecto al trabajo. Antes conseguir uno significaba acceder a una calidad de vida. Hoy la precariedad de muchos trabajos nos lleva a hablar de trabajadores pobres. Pero los datos demuestran que cuando mejora el nivel de formación, mejoran las oportunidades.

La psique qué papel juega en la búsqueda de empleo?

Es importante, pero también lo son las oportunidades. Hay que saber qué se quiere hacer realmente y en este sentido la confianza en uno mismo y en las propias posibilidades es fundamental.

El trabajo es antídoto de la depresión.

El reconocimiento de las propias aptitudes y capacidades por parte de nuestro entorno ayuda a construir una imagen positiva de nosotros. La identidad es un concepto complejo, pero podríamos decir que nos define o caracteriza, y la profesión o la ocupación contribuyen de manera clara a construirla, y la profesionalización, a reforzarla.

¿Hay margen en la administración para crecer profesionalmente y transformar con proyectos que impacten en las personas?

Incluso quien atiende en una oficina de atención al ciudadano puede crear, porque siempre hay una manera propia de atender a las personas.

Usted que está en el backstage de tanta emprendeduría, ¿no se planteó nunca crear su propia empresa?

Como psicóloga me inicié montando una asociación que generaba proyectos, pero sentí más la vocación pública. Me encanta la administración local, porque puedo estar a pie de calle, ahora desde nuestra línea de desarrollo socioeconómico de proximidad (que ella dirige).

Zenke, su segundo apellido, ¿De dónde viene?

Mi abuelo materno era originario de Prusia, vivió en Praga con su familia y luego en Hamburgo. Enrolado en la marina mercante, en la I Guerra Mundia lo desembarcaron en Alicante y terminó trabajando en una fábrica de Flix, donde conoció a mi abuela, que había dejado una Alemania empobrecida para ocuparse como nany en Catalunya.

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