Foment alerta de la pérdida de industria por la fiscalidad en Catalunya

Vuelven las críticas patronales a los impuestos de la Generalitat. Foment del Treball ha alertado este viernes del riesgo de deslocalizaciones y pérdida de empleo como consecuencia de la fiscalidad de la Generalitat, especialmente la medioambiental. La gota que ha colmado el vaso es el nuevo impuesto sobre las instalaciones que emiten gases de efecto invernadero (CO2) y las limitaciones a la incineración de residuos, previstos por el Ejecutivo catalán, al que la organización empresarial pide una "rectificación urgente". El sector químico, el automóvil y el metalútgio son d elos más afectados.

La junta directiva de Foment ha aprobado un manifiesto a favor de una industria catalana "competitiva y fuerte", y ha reclamado una política industrial que "no perjudique la actividad económica ni comprometa la competitividad en Catalunya". En su manifiesto, la patronal presidida por Josep Sánchez Llibre destaca que "Catalunya tiene 15 impuestos propios y es la comunidad autónoma que tiene más". De estos 15 impuestos propios, "5 graban directamente a la industria y se están preparando nuevos. La conclusión es que la industria en Catalunya está maltratada, en relación con otras comunidades".

Herramienta de cohesión social

Durante el acto de presentación del manifiesto, la vicepresidenta de la patronal y presidenta de la comisión de Energía, Virginia Guinda, ha resaltado el papel de la industria como "herramienta de cohesión social", motor económico que crea empleos estables con salarios muy superiores a la media y un motor de exportación. Ha lamentado que la Generalitat impulse estas dos nuevas acciones que "comprometerán la recuperación económica" en un momento que "no es el adecuado" porque la industria afronta un nuevo ciclo inversor en toda Europa para transformar el sector hacia la digitalización y la descarbonización.

La patronal considera que, en este contexto, no se pueden poner nuevos impuestos y limitaciones tecnológicas que, en la actualidad, son consideradas las mejores disponibles por el marco europeo. El vicepresidente de Foment, Joan Roget, ha asegurado que la industria catalana está comprometida con la sosteniblidad medioambiental y alineada con la transición hacia un modelo sostenible, pero ha dicho que éste ha de hacerse de tal manera que garantice la competitividad y la productividad.

Inoportuna y desafortunada

El manifiesto tacha de "del todo inoportuna y desafortunada" la nueva figura tributaría "que castigará fiscalmente la producción de actividad industrial en nuestro país y, por tanto, favorecerá en términos relativos el posicionamiento de otros lugares próximos, para atraer actividades que pudieran haberse destinado en Catalunya, y castigando en términos relativos a los productores catalanes en su competitividad productiva, en un contexto de fuerte elevación de los precios de la energía".

Por ello, la patronal ha pedido una rectificación "urgente" de estas medidas para asegurar el futuro que se había acordado en el Pacto Nacional por la Industria y ha pedido que se recupere el espíritu de este pacto para lograr una industria catalana competitiva y fuerte.

El nuevo impuesto sobre las instalaciones que emiten gases de efecto invernadero y las limitaciones a la incineración de residuos, que marca un plazo de dos años para su eliminación en Catalunya, están recogidos en el desarrollo de las medidas financieras y fiscales para 2022.