Los efectos del covid
Restaurante Joanet: “Sobrevivimos gracias a una clientela fiel y agradecida"
Cuatro bares tradicionales de Barcelona lamentan su desamparo en comparación con la gran cadena, pero destacan el vínculo con sus consumidores como clave para superar la pandemia
Paula Clemente
Periodista
Periodista del equipo de economía. Escribo sobre cuestiones relacionadas con el Consumo, las empresas (especialmente las medianas y pequeñas), el emprendimiento y el tejido tecnológico local.
La vitrina transparente muestra tortilla de patatas, cruasanes y algún que otro bocadillo. Este mostrador de un pequeño bar de Barcelona, la barra, los taburetes, la máquina de café y mínimo una estantería con varias botellas de alcohol son el hilo que le une a otros establecimientos de su estilo. Eso, y que ante la pandemia todos se han quedado solos ante el peligro. “El que es autónomo no tiene los mismos recursos ni las mismas opciones que una empresa que está preparada con una batería detrás para parar todo esto”, expone la propietaria de un restaurante con 130 años de historia en el Born, en Barcelona. “Cuesta más negociar con los propietarios por ejemplo una reducción de la cuota de alquiler si estás tu solo”, coincide la responsable de un bar cerca de Arc de Triomf. Y “una cadena puede permitirse ajustar más el precio”, remata el encargado de un establecimiento en Sant Gervasi.
Según datos del grupo de investigación de mercado NPD, los locales de su clase han perdido 15 puntos de cuota de mercado en los últimos 10 años en favor de las cadenas de restauración: 7 puntos solo en los dos años que llevamos de pandemia.
"El de las cadenas es un problema que viene de lejos”, plantean desde el Bar Mariona, situado en la Ronda Sant Pere. Aunque el covid lo haya puesto más de manifiesto, dicen, ya era habitual que un cliente eligiera comer en un local cuya marca le resultara familiar y no en un bar del que apenas tiene información.
Y este es solo uno de los problemas. “La gente ya no quiere trabajar en un bar, no se traspasa nada”, dirá tras la barra de otro local, este en el Eixample, un camarero que antes se dedicaba precisamente a traspasar locales de restauración. “Cuando se jubilan los propietarios, los hijos ya no quieren encargarse del negocio: por eso cada vez hay más familias chinas en ello, porque no les importa trabajar tantas horas y porque así pueden estar junto a la familia”, explica de nuevo la ayudante del Bar Mariona. Ella es de raíces chinas. Y su tía, responsable de este local de larga barra, extensa hilera de botellas y doble máquina tragaperras, también.
Bastantes metros cuadrados menos, pero misma estética presenta el Bar - Cafetería Albert’s. Mari, su dueña, coincide en que a la hora de gestionar deudas están solos, pero es el único inconveniente que encuentra a ir por su cuenta. Al otro lado: la capacidad de conocer a la mayoría de su clientela y de poder ofrecerles un trato casi familiar. “A veces la gente solo quiere hablar, hacemos casi de psicólogos”, afirma. Y eso, en una cadena más grande, es mucho más difícil.
Relato parecido hace Àngels desde la Plaça Sant Agustí Vell, en el Barrio Gótico. “Hemos tenido clientela muy fiel y muy agradecida, cuando abrimos las puertas tras la pandemia tenía cola de clientes que venía a gastar lo que fuera: entiendo que un establecimiento con menos años y ‘caliu’ se hundió”, analiza la propietaria del Joanet.
Porque ella no se ha lanzado al ‘delivery’, ni el Albert's, ni el Mariona, ni el local de Sant Gervasi. Y todos han sobrevivido, aunque Àngels, del Joanet, cree que por lo menos el suyo es un caso particular: más de un siglo de historia, poder pasar sin un ICO y tener una clientela verdaderamente entregada. La prueba es que a su alrededor, entre tres y cuatro negocios de su mismo estilo, no han podido contarlo.
Suscríbete para seguir leyendo
- Manolo García: “De estas elecciones me ha gustado que, de cada dos catalanes, uno no ha ido a votar”
- Entrevista con Fabio Capello, 30 años después del 4-0 del Milan al 'Dream Team' de Cruyff: 'No hubo final
- Estos mutualistas se quedan sin recuperar su dinero de la renta
- Marc Janeras: 'Los gestores de Rodalies han conseguido vaciar el tren; están desmantelando el uso de la R3
- Los bancos tendrán que ofrecer a sus clientes morosos renegociar la deuda antes de llevarles al juzgado
- Tres turistas catalanes mueren en un tiroteo en Afganistán
- La palabra catalana de tres letras para despedirse que debería usarse en toda España
- Esto es lo que más mira Hacienda este año de tu declaración de la renta