Iniciativas

El Cercle reclama reformas básicas consensuadas para una década

El documento elaborado como marco de su reunión anual del 16 al 18 de junio reclama que Madrid no actúe como "aspiradora de recursos de resto de España"

El Rey Felipe VI y el presidente de Corea del Sur, Moon Jae In estarán presentes en la cena inaugural de las jornadas en Barcelona el próximo 16 de junio

Javier Faus

Javier Faus / JOAN MATEU PARRA

Agustí Sala

Agustí Sala

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El Cercle d'Economia exige "una política reformista consensuada" con una mayoría parlamentaria que permita afrontar las reformas esenciales para los próximos 10 años. En el documento que enmarca la próxima Reunió Cercle d'Economia que se celebrará en Barcelona del 16 al 18 de junio, la entidad reprocha a los poderes públicos haber dejado aparcadas en los últimos años reformas básicas como las que afectan a la educación, el mercado de la vivienda, el sector energético o las pensiones y exige aprovechar el impulso de los fondos europeos para apostar por la inversión en investigación, desarrollo e innovación (I+D+i) y salir del constante liderazgo en un elevado paro estructural.

En la presentación de las jornadas, el presidente de la entidad, Javier Faus ha insistido en la necesidad de los consensos y de huir de la confrontación. Y preguntado sobre los indultos a los presos del `procés' ha afirmado que convocará una junta extraordinaria para establecer una posición del Cercle sobre la cuestión.

La entidad entiende que se ha iniciado un nuevo tiempo político también reclama la revisión del modelo territorial, apostando por uno basado en la "pluralidad y la cohesión territorial". A la vez que reclama rechazar el frentismo ante Madrid, comunidad a la que pide que reconozca las ventajas de la capitalidad, exige que Catalunya "salga de la parálisis" y que vuelva a "centrarse en ser el motor económico de España". Faus ha afirmado que, a la centralidad como elemento dinamizador hay que sumar la descentralización con un modelo más parecido a la Alemania federal que a Francia. El documento denuncia que "la capitalidad de Madrid no puede actuar como una aspiradora de recursos del resto de España". A la vez que reclaman a Madrid que "no conciba al resto de España como su caja de resonancia", exige al independentismo catalán que "los experimentos unilaterales no son adminisibles" en un estado de derecho.

En materia fiscal, el Cercle descarta una armonización fiscal al alza y el impuesto del patrimonio, aunque sí defiende una cierta armonización entre las autonomías.  

El documento propugna una reforma del sistema de financiación autonómica "que corrija progresivamente los desequilibrios" y que implante "el principio de ordinalidad". A los partidos de "raíz catalana" les reclama que sean "propositivos" en defensa de un modelo común, que "abogando por el equilibrio territorial, contribuya a relanzar Catalunya". En todo caso recomienda al soberanismo "poner las luces largas" y "entender que su proyecto, si tiene viabilidad , será a largo plazo".

Menos seguridad jurídica

El documento, titulado 'Agenda reformista en beneficios de las nuevas generaciones', una vez que se se supere la crisis provocada por el coronavirus, reclama "revertir la dinámica partidista" que predomina en la actualidad para que haya "consenso en materias básicas". De hecho alerta de que la evolución actual ha conllevado "la bajada de los niveles de seguridad jurídica".

En materia de políticas sociales, el texto del Cercle defiende una potenciación decidida de la formación profesional (FP) en colaboración con el tejido productivo como herramienta para preparar más y mejor a los jóvenes. La entidad, que aboga por la colaboración público-privada, destaca la necesidad de incrementar la productividad, una de las grandes carencias del país. De ahí viene la apuesta por la I+D+i, que deberá combinarse con una mayor apuesta por invertir en el sistema sanitario, dada la prolongación de la esperanza de vida. Entre los ámbitos en los que el país debe volcarse están las energías limpias, así como la digitalización y la inteligencia artificial, que han de servir para un sector público "más eficiente" y unas empresas "más competitivas".

De Pedro Sánchez al Rey

La reunión del Cercle de este año, que se celebrará en Barcelona con la intención de seguir desarrollándose en la capital catalana tras varios años en Sitges, se convertirá de nuevo en una especie de cumbre económica, empresarial y política. Está previsto que el rey Felipe VI participe en una cena inagural el día 16 junto con el presidente de Corea del Sur, Moo Jae In.

Bajo el lema 'La gran reconstrucción. Retos y oportunidades para la empresa, la economía y la política', a lo largo de las sesiones intervendrán los presidentes del Gobierno y de la Generalitat, Pedro Sánchez y Pere Aragonès. También estarán este encuentro que se produce tras el parón provocado por la pandemia, las vicepresidentas segunda y tercera, Nadia Calviño y Yolanda Díaz, el líder del PP, Pablo Casado.

Empresarios y sindicatos

También habrá una nutrida representación empresarial, económica y social, con Ana Botín, presidenta del Banco Santander; José Ignacio Goirigolzarri, presidente de Caixabank; José María Álvarez, secretario general de UGT; Pablo Isla, presidente de Inditex; José Mª Alvarez-Pallete, presidente de Telefónica; Francisco Reynés, presidente de Naturgy, y Josu Jon Imaz, consejero delegado de Repsol. Y a nivel internacional, estará con Phillip Hildebrand, vicepresidente mundial de BlackRock. También se aprovechará para debatir sobre el modelo terriitorial con los presidentes de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla; de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, de la Comunitat Valenciana, Ximo Puig, y Baleares, Francina Armengol. Al final del la úlitma sesiñón se entregará al primer ministro italiano, Mario Draghi, que recibirá el I Premio Cercle d’Economia a la Construcción Europea.

En la presentación de las jornadas, el primer teniente de alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, ha destacado que esta reunión supone volver a poner la capital catalana en el mapa en un momento en el que se reactiva la actividad. A su vez ha subrayado la importancia de que asista el presidente de Corea del Sur, dada la vocación barcelonesa de estrechar lazos con Asia.