La desconocida Friuli Venecia Julia

Entre las cimas de los Alpes y de los Dolomitas, las olas del Adriático, las plazas de elegantes ciudades, las calles de los pueblos, los sitios declarados como Patrimonio Mundial por la Unesco y las colinas del Collio, nos encontramos con Friuli Venecia Julia. Una región única en la que se agrupa un concentrado de aquellas características que hacen de Italia un lugar tan amado por escritores, poetas y viajeros. 

Esta tierra, tan genuina como auténtica, ha sabido convertir su posición geográfica fronteriza, si bien en el centro de Europa, en una riqueza: en apenas dos horas de viaje se entrecruzan las culturas italiana, eslava y germánica, en un viaje por la historia, las tradiciones, las lenguas y las confesiones religiosas. Gran parte de esa historia la encontramos en sus ciudades principales: Trieste, Údine, Pordenone y Gorizia. O en aquellos lugares que la Unesco ha reconocido como Patrimonio de la Humanidad: Aquilea, Cividale del Friuli, Palmanova y Palù di Livenza, sin olvidar la belleza de los Dolomitas Friulanos, con su patrimonio naturalístico y cultural.

La belleza de Trieste

La ciudad de Trieste se encuentra incrustada entre el blanco del paisaje kárstico y el azul intenso del Adriático. Es la más internacional de las ciudades de la región, en constante evolución y al mismo tiempo única por sus cruces de idiomas, pueblos y religiones, con una matriz centroeuropea inmersa en su alma mediterránea. Estas múltiples religiones han dejado su huella en algunas construcciones que se pueden visitar: la sinagoga, la iglesia greco-oriental y ortodoxa serbia de San Spiridione, la iglesia anglicana, el santuario mariano en el Monte Grisa y la catedral de San Justo.

Pero, sin duda, una visita imprescindible es el castillo de Miramare, la residencia de cuento de hadas de Maximiliano de Austria y su mujer Carlota de Bélgica. El blanco del castillo contrasta con el azul del Adriático y con el verde esmeralda de los espacios que lo rodean.

Trieste también es la ciudad del café, durante muchos años ha sido el puerto más importante para su comercialización. De hecho, en la ciudad hay una industria vinculada a su importación, procesamiento y exportación. Los antiguos cafés de Trieste son lugares muy característicos que han sido siempre puntos de encuentro de cultura, arte y tradición. 

‘Isla del sol’

Una de las localizaciones más románticas de Friuli Venecia Julia la encontramos a una hora en coche de Trieste: Grado, también conocida como la 'isla del sol'. Una playa de extensos kilómetros de arenales orientados al sur. Abrazada por la laguna que crea un marco mágico en torno a la isla, también es rica en historia con un pueblo que recuerda las arquitecturas venecianas. Nacida en época romana como escala mercantil de Aquilea, su centro es un laberinto de calles y plazoletas a las que se asoman las pintorescas casas de pescadores. Un destino para quienes buscan el mar, pero también cultura e historia.

De hecho, Grado es un importante 'kitespot' para los amantes de los deportes de viento que encuentran aquí las condiciones ideales para cabalgar las olas.Para regenerar el cuerpo y el alma, las termas marinas de Grado ofrecen un parque de aguas termales y una zona caliente que utiliza niebla marina y una biosauna. Fue el balneario más popular durante el Imperio de los Austrias por sus propiedades beneficiosas para la salud.