Opinión | Apunte

Sergi Mas

Sergi Mas

Periodista

Tirar la toalla, por Sergi Mas

Manolo González, en un entrenamiento del Espanyol.

Manolo González, en un entrenamiento del Espanyol. / RCDE

¿Cuántos de ustedes lo han hecho o están a punto de tirar la toalla? Pues aquí tienen un servidor. Sin gritos, sin nervios, pero con mucha decepción. 

Sé perfectamente que este puede ser el peor momento para tirarla, antes de una última jornada que nos debe dar una clasificación final digna para afrontar un play off… Pero lo peor es que no tenemos ni toalla

Tengamos claro que perder la ilusión es lo peor que nos puede pasar, y el mundo perico transita por esa estrecha línea que transcurre entre la decepción y el hartazgo, porque sería la primera vez en nuestra historia que el equipo no asciende inmediatamente tras un descenso

Desde el club se ha mantenido históricamente el discurso de “conseguir los objetivos”; una expresión propia de un 'youtuber' que esconde mucho miedo a afrontar públicamente un mensaje sincero y valiente. Cuánto me hubiera gustado escuchar a algún responsable del club decir: “No ascender tendrá consecuencias”. O bien: “Resulta imprescindible subir a Primera”. Tengo problemas de oído, por edad, pero no recuerdo haber escuchado esas frases, acompañadas de una gestualidad dura y exigente. No las recuerdo. 

Por el contrario, sí que he escuché el discurso de Pere Milla, habitual enviado especial a Babia, todo un militante del Bob Marley Fútbol Club y a quien parece que cada vez que habla no le vaya la fiesta: “Hay que jugar el play off con alegría”. Al más puro estilo Ramis.

Jamás un socio perico quiere escuchar ese discurso. Jamás. Después que no se queje si en el estadio se escuchan silbidos cuando toca la pelota, porque ya van dos veces que habla y dos veces que mete la pata. 

Total, que el primer resumen de la 2023-24 y de la degradación es que nos hemos jugado la posibilidad del ascenso directo jugando en la Ciudad Deportiva Lezama 2 ante el Amorebieta, que ni siquiera ganamos, y que se nos quedara la cara como la de Nico Melamed en la segunda parte, aunque tampoco tengo claro que el canterano pensara en el club. Y además con el 21 en la espalda.