MANCHESTER CITY - CHELSEA (1-0)

El Manchester City se resarce del dolor de la Champions y se clasifica para la final de Copa al batir al Chelsea

El Real Madrid sobrevive a la tortura del Manchester City

Grealish encara a Malo Gusto, en la semifinal de la Copa inglesa en Wembley.

Grealish encara a Malo Gusto, en la semifinal de la Copa inglesa en Wembley.

Albert Guasch

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El Manchester City se clasificó para la final de la Copa (FA Cup) y se resarció de la amarga eliminación ante el Madrid en la Champions. Un gol de Bernardo Silva en el minuto 84 dio el pase al equipo de Pep Guardiola, que no jugó en Wembley un partido brillante ante el Chelsea, pero que tuvo suficiente con un único gol para intentar aspirar al doblete. Líder en la Premier, Manchester United o Coventry, que se enfrentan este domingo, se presentan como el último obstáculo para levantar el trofeo.

El City desatascó el encuentro con una acción que comenzó Doku, una culebra que dio explosividad al ataque, cedió en profundidad a De Bruyne, que cruzó el balón. Nadie del Chelsea logró despejar y Bernardo Silva empujó el esférico hacia adentro.

El City acusó, probablemente, la fatiga por el esfuerzo del miércoles ante el Madrid. Jugaron prácticamente los mismos jugadores, salvo la introducción de Stones y del portero Stefan Ortega. Aun así, logró resistir las embestidas del Chelsea. El portero Ortega estuvo particularmente acertado. Guardiola se quejó de hecho de tener que jugar apenas tres días después de disputar una extenuante prórroga en la Champions.

Quejas de Guardiola

"Es inaceptable que nos dejen jugar hoy", afirmó. "Es imposible, por la salud de los jugadores. No es normal. Es inaceptable. 120 minutos, las emociones del Madrid, la forma en que perdimos... Sé que este país es especial la Copa, pero es por la salud de los jugadores. No entiendo cómo hemos sobrevivido hoy".

Al Chelsea se le vio realmente más fresco y dispuso de hecho de relevantes oportunidades de gol, sobre todo en las botas del exjugador del Villarreal Nicolas Jackson, que estuvo fallón de cara a puerta. Pochettino se desesperó en la banda. Esta copa era su mejor oportunidad para salvar una temporada gris pese a la multimillonaria inversión.

Al final del encuentro se le vio discutir con el colegiado. Posiblemente le reclamó una mano en el área de Grealish tras el lanzamiento de una falta de Cole Palmer. Ni el árbitro ni el VAR vieron penalti. Por lo visto, tiene razones para reclamarlo.

La felicidad de Silva

Bernardo Silva recalcó el efecto sanador de la victoria. Cabe recordar que fue uno de los que falló en la tanda de penaltis contra el Madrid. Su tiro al centro lo atajó sin despeinarse Lunin. "Estoy muy feliz después de una semana muy frustrante para todos nosotros, para mí personalmente. Lo bueno es que en el fútbol en el Manchester City juegas cada tres días. Cada tres días tienes la oportunidad de arreglar las cosas y ahora tenemos la oportunidad".

El portugués remarcó la fortaleza del City. "A lo largo de los años, lo hemos hecho muchas veces y hoy el equipo mostró mucho carácter".