Alcaraz renuncia entre lágrimas a jugar en Barcelona

El sueño de ver una semifinal entre Carlos Alcaraz y Rafael Nadal después de que el sorteo emparejase en la misma zona del cuadro al 12 veces campeón del torneo y al vencedor de las dos últimas ediciones, se esfumó antes de comenzar el Barcelona Open Banc Sabadell tras el inesperado anuncio de la retirada del tenista murciano. 

La ilusión de ver en acción a los dos iconos del tenis español parecía que al fin iba a ser posible en Barcelona, pero se desvanecía de golpe por la mañana después de que Alcaraz descartara su participación por culpa de las molestias en el antebrazo derecho que arrastra desde hace semanas y que ya le obligaron a renunciar la semana pasada en Montecarlo. 

Con vistas a Madrid

Alcaraz estuvo realizando una última prueba en el Club de Tenis de Murcia acompañado por Juan Carlos Ferrero, su médico Juanjo López y su fisio Juanjo Moreno. Las molestias seguían cuando tocaba las bolas con la derecha, por lo que el tenista optó por acabar el entrenamiento, del que se marchó entre lágrimas, consciente de que se trata de una lesión muscular que requiere su tiempo de recuperación. 

Un duro golpe para las aspiraciones de Alcaraz en la gira de tierra que le complica su preparación cara al objetivo de ganar Roland Garros que tenía marcado en rojo en su agenda. La recuperación no avanza y el tenista y su equipo han optado por darse margen hasta el Masters 1.000 de Madrid, que comienza el 24 de abril y donde el tenista no debutaría hasta el viernes o sábado de esa semana. 

Alcaraz viajará este lunes a Barcelona, donde debía debutar el miércoles ante el francés Luca Van Assche. El joven astro atenderá algunos actos publicitarios que tenía previstos. La baja a última hora del número 3 del mundo deja muy descompensado el cuadro por la parte alta, donde el tenista murciano podía haberse cruzado en las semifinales con Nadal, como soñaban los organizadores y los aficionados que hacía días habían agotado las entradas. Alcaraz será sustituido por el húngaro Fabian Maroszan (37 mundial), como cabeza de serie número 17 del torneo. 

"Jugar, jugar y jugar"

En ausencia del tenista de El Palmar los focos apuntan ahora a un Nadal que parece listo para reencontrar las mejores sensaciones tenísticas en un escenario donde podría jugar por última vez si esta temporada pone fin a su carrera. 

La ECO realizada el jueves en la Creu Blanca con el doctor Ramon Balius confirmó que sus abdominales están bien, que no tiene lesión. Es hora de saltar a la pista. "Jugar, jugar y jugar. Ganar o perder, pero competir. Dejar de hablar de lesiones", le animan desde hace días en su entorno más próximo.

Desde que el miércoles llegó a Barcelona, Nadal ha ido de menos a más, tanto en intensidad de sus entrenamientos como en sensaciones y confianza cara a su debut el martes ante el italiano Flavio Cobolli (63 mundial). La penúltima prueba la hizo a puerta cerrada, por petición propia, en presencia solo de su equipo y un grupo de familiares y amigos que tuvieron acceso a la pista 18, la más escondida del RCT Barcelona. La organización permitió solo tomar imágenes a las televisiones y fotógrafos durante 5 minutos.

Tsitsipas llega en forma

La baja de Alcaraz es un golpe también para el torneo que pierde al principal favorito aunque mantiene un gran cartel con la presencia de los dos finalistas de Montecarlo, Stefanos Tsitsipas y Casper Ruud.

El tenista griego llegará este lunes a Barcelona como campeón del Masters 1.000 monegasco tras batir al noruego por un contundente 6-1 y 6-4 e inscribir su nombre por tercera vez tras ganarlo anteriormente en 2021 y 2022.