El menisco de Alexia Putellas también se vio afectado con la rotura del ligamento cruzado

La capitana del Barça lleva dos años complicados. Desde que se lesionase el 7 de julio de 2022, a escasas 48 horas de que España debutará en la Eurocopa de Inglaterra, Alexia Putellas ha vivido pendiente de su rodilla. Recibió el alta el 26 de abril de 2023, pero desde ese día no volvió a jugar prácticamente con normalidad hasta el inicio de esta temporada con el Barça. Ahora vuelve a estar de baja, tras resentirse de su lesión en la articulación y necesitar pasar por el quirófano tras el choque en el partido contra el Benfica el pasado 14 de noviembre. Desde el club no han querido dar mucha información sobre el diagnóstico de la lesión por la que tuvo que someterse a una artroscopia el pasado 27 de diciembre. La verdadera explicación reside, según ha podido saber EL PERIÓDICO, en que Alexia, en su momento, se rompió el cruzado en una lesión en la que también quedó afectado el menisco. Y, tras el golpe en el partido de Champions, necesitó de una nueva intervención donde, además de limpiar la zona, se suturó de nuevo el cartílago. Está previsto que Alexia vuelva a correr la semana que viene.

La doble Balón de Oro tuvo que abandonar el césped cuando estaba en lo más alto. La lesión llegó en un momento clave de su carrera. La Eurocopa tenía que ser su momento, el torneo que la presentara más allá del Barça a todo el mundo. Sin embargo, tuvo que ver el primer partido desde la grada antes de volar a España para ser operada días más tarde, cuando la rodilla se desinflamó lo suficiente. Desde entonces, los meses se han hecho largos.

Operaciones, horas y horas de rehabilitación y la mente puesta en volver lo antes posible, pero siempre con garantías. Los plazos se redujeron hasta los 9 meses (lo habitual es aproximadamente un año), pero pese al alta, la vuelta fue paulatina. La luz verde de los médicos la recibió el 26 de abril de 2023, justo antes de las semifinales de la Champions en el Camp Nou ante el Chelsea. Volvió para la gran cita, bajo una masiva atención mediática, pero no disputó ni un minuto. Con el paso de los días, fue aumentando poco a poco los esfuerzos mientras seguía en la dinámica del Barça, aunque con la selección la cosa no fue así.

A raíz de la carga desmedida antes del Mundial por decisión del exseleccionador español Jorge Vilda, Alexia tuvo que dosificarse para la cita de Australia y Nueva Zelanda y consiguió llegar al inicio de temporada con el Barça casi en plenas facultades. Los primeros meses de la campaña permitieron vislumbrar a su mejor versión. Volvía a sonreír y a dejar detalles de su talento sobre el césped. Hasta que contra el Benfica, el 14 de noviembre, notó algo en la rodilla y volvieron los fantasmas.

Las molestias volvieron y las preocupaciones también. Tras someterse a varias resonancias magnéticas y otras pruebas médicas, y paralelamente a un tratamiento conservador durante casi 15 días, Alexia Putellas volvió a pasar por quirófano. Mediante una artroscopia (técnica mínimamente invasiva que permite introducirse dentro la articulación) volvió a ser intervenida para acabar de sanar el menisco, además de la limpieza de la zona. Este tipo de segundas operaciones son habituales en estos casos y Alexia, desde la intervención, ha recuperado las buenas sensaciones.

"Simplemente, lo que ha ocurrido, es lo que pasa a veces pasa: el cruzado va perfecto, pero el menisco que se cosió se ha vuelto a romper o simplemente no ha acabado de curar", relatan fuentes conocedoras del proceso de recuperación de la futbolista. Pese a la rotura, el menisco suele preservarse en este tipo de operaciones porque es clave para una buena evolución de la rodilla. En las mejores condiciones suele curarse un 80% cuando van acompañados con alguna otra rotura en la rodilla. Si es aislado, la tasa de recuperación es de un 70%.

Alexia sigue de baja, pero la recuperación está siendo positiva. De media, este tipo de operaciones acarrean entre 6 y 8 semanas de baja. De momento, este miércoles se cumplirán las cuatro semanas desde que fue nuevamente intervenida. Una operación de la que ya trascendió que fue rápida (no más de 30 minutos) y donde no hubo más sorpresas. Alexia aún sigue sin entrenarse con el equipo, pero según ha podido saber EL PERIÓDICO, la semana que viene volverá a correr y se espera que pueda estar de vuelta en poco más de un mes.

La renovación, en segundo plano

Alexia, además de estar inmersa en su proceso de recuperación, sigue teniendo abierta la renovación con el Barça. Su prioridad indiscutible es renovar con el club blaugrana y aún no ha escuchado ninguna de las propuestas que le han llegado. La capitana tiene sobre la mesa la última oferta del club, de la cual la entidad no ha tocado una sola coma desde hace meses. La oferta que tiene encima de la mesa es la última que le ofrecerá la entidad azulgrana, según cuentan desde los despachos del Barça, ya que defienden que no tienen intención de negociar más con la futbolista las cláusulas de su contrato.

"Tiene ganas locas de renovar", dicen desde su entorno. Sin embargo, hay factores clave que Alexia quiere tener claros antes de dar el 'sí'. La principal prioridad de la futbolista es recuperarse plenamente de la rodilla y estar de nuevo a disposición del equipo. Otro de los factores que también es importante para la capitana es conocer quién será el relevo de Jonatan Giráldez en el banquillo del Barça y su papel dentro del equipo. Las cantidades, por debajo del millón de euros, no son ningún impedimento ni barrera para la capitana.