Vitor Roque, "la sonrisa" culé, ya disfruta de azulgrana

La sonrisa culé. Así ha bautizado Rafa Yuste a Vitor Roque en su presentación como jugador del Barça. El brasileño, que ya debutó este jueves con el equipo de Xavi Hernández ante las Palmas, ha pisado el césped de la ciudad deportiva que ya lleva unos días frecuentando bajo la atenta mirada de Deco, su gran valedor. El que está llamado a marcar la resurrección de un Barça aún con muchas necesidades llega a Barcelona para "cumplir un sueño". Tímido, mirando más a la pelota que a las cámaras, Roque ha rubricado su firma en el contrato que lo une al Barça hasta 2031.

Bajo el cielo encapotado de Sant Joan Despí y aún con cara de sueño, Vitor Roque avanza hacia la gran lona que tenía estampada su cara. Mira disimuladamente hacia la grada, donde además de su familia, está también todo un séquito de los despachos culés. Deco se lo mira desde la parte alta, contemplando como su nuevo protegido avanzaba hacia el atril acompañado por Rafael Yuste, vicepresidente primero del FC Barcelona, que ha presidido el acto en la ausencia del presidente Joan Laporta. Bojan Krkic y Enric Massip no faltaron a la cita.

"Bestia competitiva"

Tigrinho llegó a Barcelona el 27 de diciembre de 2023 y, desde entonces, ha sido el centro de todas las miradas. Tanto en sus primeros entrenamientos, escoltado por Araujo y Raphinha, como también en su debut, durante el encuentro ante Las Palmas la noche anterior a su presentación. Su estreno duró 12 minutos y, pese a poderse sacar muchas conclusiones, a Xavi le convenció. "Es una bestia competitiva", reconoce Yuste que le apuntó el entrenador culé tras el encuentro.

"He dormido cuatro horas", cuenta entre risas y visiblemente nervioso. El joven de 18 años llega al Barça con una responsabilidad añadida de volver a hacer disfrutar y sonreír a los culés. Su desparpajo con el balón y su osadía le convierten en una pieza clave y necesaria para que el engranaje del conjunto culé empiece a funcionar.

Primero tocó el traje, donde Vitor Roque se desenvolvió como pudo, siempre mirando de reojo el balón azulgrana que descansaba fuera del césped. "Vitor Roque tiene lo que falta mucho en este mundo: una sonrisa", arrancó Yuste al lado del crack brasileño, que quiso poner en valor el compromiso del delantero desde que se unió a la disciplina azulgrana. "Esta plantilla es una familia, lo vimos ayer en la celebración del gol de Gundogan. Necesitamos alegría para que este grupo sea cada vez más potente". "Ayer fue a un acto con las peñas en Las Palmas. Quiere implicarse y saber por qué somos más que un club", añade Yuste.

Cuando el vicepresidente primero del Barça sacó su zamarra, con el 19 a la espalda, Roque la cogió con ganas. Posó con ella, juntamente con Yuste y Deco, que saltó la valla para unirse a la foto, y una sonrisa de oreja a oreja. Tras las fotos protocolarias y la firma del contrato, Roque coge una pequeña caja que descansa sobre el atril. Cuando la abre se queda pensativo y, con determinación, empieza a leer la información que aparece en su nuevo carnet que le acredita como un culé más: es el socio 147.522.

Y, tras dejar el traje en la taquilla, llegó el momento de vestirse de corto. Nervioso saltó al campo, pisando primer el césped siempre con el pie derecho y se plantó justo delante de su lona, acabada de firmar y que la Fundación del Barça subastará con fines benéficos. Con el balón en los pies, tocaron los malabares de rigor. Nervioso, sin ganas de convertirse en un meme como en otras presentaciones ha sucedido, Roque sonríe nervioso. Tras unos toques, mira a su familia y a los responsables de comunicación del club con una duda: "¿Hago más?"

Roque llega a Barcelona para disfrutar, para hacer sonreír y, como no, para deleitar a los culés con sus delicias y goles. Recala en el vestuario en un momento de necesidad, tanto de fútbol como de sonrisas.