Baloncesto

Los campeones de España 'special' que compiten contra equipos sin discapacidad

El Santa Eulàlia Special, campeón de España de baloncesto con discapacidad, decidió empezar a jugar en una liga senior sin discapacidad

El entrenador José Miguel Esteller, dando instrucciones durante el entrenamiento del SESE Special

El entrenador José Miguel Esteller, dando instrucciones durante el entrenamiento del SESE Special / Zowy Voeten

Jordi Grífol

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

EL PERIÓDICO rescata en una serie especial para estas fiestas navideñas algunas de las historias de este 2023 que por el alud de informaciones que se generan en el día a día merecen una nueva mirada y atención.

Sergio llega al entrenamiento enfundado en su camiseta amarilla de Los Angeles Lakers, la de Lebron James. Coge el balón, lo bota hasta la línea de tres, se para al borde del perímetro y encesta. Repite el proceso en tres ocasiones, sin fallar un solo tiro. "¿Qué te pasa en la muñeca?", le pregunta riendo su compañero Edu. Sergio tiene dos medallas de oro. Ganó los Special Olympics con la selección española en Los Angeles y Abu Dabi. Este año, con el SESE Special, ha empezado a competir en una liga contra equipos sin discapacidad.

El Santa Eulàlia no tenía rival. En la liga que organiza la Federació Acell (Federació Catalana d’Esports per a Persones amb Discapacitat Intel·lectual) ganaba cada partido con diferencias de hasta 30 puntos. A nivel estatal, justo en noviembre, se proclamó campeón de España por segundo año consecutivo. "Ya no había ilusión", afirma Mark. "Durante varios años hemos insistido en que queríamos jugar contra rivales más fuertes", añade.

"Mucho miedo"

Jugar contra equipos sin discapacidad era algo que hablaban desde hacía tiempo, y que se hizo realidad a principios de año. "Nos reunimos el club, los jugadores y las familias y aprobamos jugar en una liga sénior contra personas sin discapacidad", explica su entrenador, José Miguel Esteller, que lleva 30 años entrenando a equipos con discapacidad en la Federació Acell y es el entrenador de España en los Special Olympics.

"Íbamos con mucho miedo, no sabíamos qué nos encontraríamos y cómo se lo tomarían los demás clubs, a los que decidimos comunicárselo. Sobre todo por un tema muy importante, que nuestros jugadores no tienen filtro, celebran cada canasta...", comenta Esteller. Pese a que encestan con facilidad, cada balón que pasa por el aro es una fiesta, también en los entrenamientos.

Un nuevo mundo

El primer partido de liga era muy importante para el equipo. "En el primer cuarto el otro equipo se reservó un poco... Hasta que miraron el marcador y se dieron cuenta de que estaban perdiendo. Subieron el nivel y apretaron en el segundo y tercer cuarto, pero no llegaron", recuerda el entrenador.

Entrenamiento del equipo del Santa Eulàlia Special.

Entrenamiento del equipo del Santa Eulàlia Special. / ZOWY VOETEN

El SESE Special había ganado su primer partido en una liga normalizada, en la liga sénior del Consell Escolar. "Nos encontramos en una situación que no nos habíamos planteado: ganar. Se nos abrió un mundo", asegura. Terminaron la temporada con un balance de cinco victorias y siete derrotas, y este mes de octubre han terminado 2-4. Compitiendo cada partido.

"Al principio los equipos nos subestimaban un poco, todo el mundo piensa que un equipo de especiales, pues bueno, jugarán bien pero no podrán. Los equipos que han jugado contra nosotros ya lo ven de otra manera", comenta Sergio. "El baloncesto es una parte muy importante de mi vida. Tengo muchas amistades gracias a ello", añade. "Nos hemos adaptado bien, es un nivel muy alto y se nota, pero hemos ganado partidos y vamos haciendo. Nos sentimos muy bien, lo más importante es disfrutar y pasarlo bien, pero también competir", comenta Xavi, capitán del equipo y uno de los más veteranos.

Deseo irrefrenable

Más de la mitad de los jugadores llevan muchos años jugando juntos, otros vienen del baloncesto federado, y algunos como Hugo no sabían ni botar el balón. "No sabíamos cómo hacerlo avanzar técnicamente. Un día le pasamos un vídeo de tecnificación y eso le motivó. Le íbamos pasando vídeos y él trabajaba a base de imitarlo. Mejoró mucho", explica Esteller. "Hugo, ¡deja el balón!", le ordena su entrenador. Cuando coge la pelota, tiene un deseo irrefrenable de correr hacia canasta.

Entrenamiento del Santa Eulàlia Special.

Entrenamiento del Santa Eulàlia Special. / ZOWY VOETEN

"Hemos llegado a la conclusión de que podemos jugar contra personas sin discapacidad, hemos logrado una asimilación. Nuestros jugadores se han puesto a la altura. Queremos igualdad para las personas con discapacidad, y en este caso creo que lo hemos conseguido", asegura Esteller. El año que viene, quieren volver a ser campeones de España, aunque están preocupados porque si no encuentran algún patrocinador, no podrán costearse el viaje.

Recuerdos preciados

El baloncesto es fundamental en su vida. Marc, uno de los más habilidosos con el balón, sueña con ser entrenador profesional. "Me veo llegando", asegura. Ya ha entrenado a un par de equipos, y su objetivo ahora es sacarse el título de entrenador.

Edu, un gigante de 2,05 m que, claro está, se desenvuelve bien bajo el aro, explica que tiene que entrenar para mejorar su mecánica de tiro, mientras muestra un álbum de fotos inacabable. Son sus recuerdos más preciados. Todos ellos, en una cancha y con una camiseta de tirantes.