El lamento del recordman español de maratón: "Si vieras mi cuenta bancaria, te daría la risa"

Pese a estar dotado de un extraordinario talento para la carrera de largo aliento, Kenenisa Bekele mostró este domingo en Valencia lo que la dispersión y el paso del tiempo no perdonan. Apenas aguantó 15 kilómetros con el grupo delantero. Superados los 40 años de edad, el etíope rebaña su carrera deportiva en busca de las últimas migajas.

En su día, Bekele tuvo el honor de rebajar las extraordinarias plusmarcas mundiales del etíope Haile Gebrselassie en las distancias largas en pista, 5.000 y 10.000, que a finales del Siglo XX parecían inalcanzables. No hubo pasado un lustro cuando, con tan solo 22 años, el etíope de Bekoji mejoraba los registros del emperador Gebrselassie.

Con sus nuevos récords globales, tres oros olímpicos, once títulos en campo a través y dos victorias en el maratón de Berlín, Bekele nunca gozó del carisma, la suerte y la popularidad de su compatriota predecesor, a quien siempre quiso emular, incluso como hombre de negocios en la plenitud de su carrera atlética, lo que sin duda le ha restado capacidad para intentar ser el mejor maratoniano de siempre, el sueño que no podrá cumplir rebasados ya los 40 años de edad.

Su teórico rival en el maratón de Valencia era a priori su sucesor en la tabla de récords en pista, el ugandés Joshua Cheptegei, abonado a la ciudad del running desde que en plena pandemia lograra la plusmarca universal de 10.000 (26.11.00) en la pista del Turia.

Cheptegei debutaba en la distancia con la prudencia del novato, filtrando de antemano que su preparación no se basa en grandes tiradas y que su objetivo en 2024 se sitúa en el estadio de Saint-Denis y no en la meta del maratón olímpico parisino en la explanada de Invalides. 

El ugandés pasó el medio recorrido valenciano en 1.00.34, ocupando la cola de un pelotón de diez corredores, puestos en fila a continuación tras el cambio de ritmo en el 25 del fornido etíope Sisay Lemma, ganador del maratón de Londres en 2021. 

Descolgado Bekele y descolgado Cheptegei antes del kilómetro 30, tres atletas se disputaban el tramo final hasta que Lemma en el 35 demarró con suma facilidad y se fue definitivamente solo hasta linea de meta para ganar con 2.01.48, nuevo récord del circuito. 

Bekele acabó cuarto con 2.04.18, mientras Cheptegei atravesaba la meta fundido, por encima de 2.08, seguramente consciente de que correr un maratón con garantías exige previamente disponer de un kilometraje ilimitado.

Por detrás, y tirando del segundo grupo, el gallego Tariku Novales finalizaba undécimo con 2.05.48, primer español sub 2.06 mejorando el récord de España de Ayad Lamdassem y asegurando su plaza olímpica en París, teóricamente junto con Yago Rojo, que acabó en mínima con 2.07.47. "He ido tirando del grupo y el viento nos ha molestado, el récord podía haber sido mejor, pero en todo caso estoy muy contento porque sabía que estaba bien y lo he confirmado", recalcó Novales, feliz con su resultado, el de un atleta nacido en Etiopía y adoptado a los seis años de edad por una familia gallega que no tardó en apuntarle al club de atletismo de Noia.

Novales, eso sí, no quiso dejar pasar la oportunidad de lamentarse por la falta de ayudas y acusar por ello a la Federación Española en un duro alegato: "Si vieras ahora mismo mi cuenta bancaria, te daría la risa. La verdad. Lo he invertido todo en poder llegar en este estado de forma. Y no es barato preparar un maratón. No es barato. Todo financiado gracias a la ayuda que me da Adidas, al patocinio que tengo. Porque, si no, sería totalmente imposible. La Federación en todo momento, aparte de ignorarme y hacerme esperar meses para darme una respuesta, me ha dicho directamente que no cumplo con los criterios. La gente flipa cuando les digo que no tengo ningún tipo de ayuda. Fuera de España, flipan. No puedo entender que un atleta de 2.07 no tenga ningún tipo de ayuda. Yo qué sé. Me voy a callar ya porque si no...".

Récord pulverizado

Etiopía volvió a triunfar, en categoría femenina, con tres mujeres en el podio y Worknesh Degefa en lo más alto gracias a un mejor crono de 2.15.51. La española de origen marroquí Majida Maayouf, como estaba más que previsto, pulverizó el récord de España de la catalana Marta Galimany con casi 5 minutos de margen al acabar quinta en 2.21.27. La tarraconense finalizó en 2.28.16, por detrás de Laura Luengo (2.25.35) e Irene Pelayo (2.26.40).

Tras 12 años afincada en Álava, la todavía marroquí lograba hace un año el récord de su país en este mismo circuito con un registro casi calcado al de su nuevo récord español. Siete meses después, Maayouf conseguía la nacionalidad española. Tres años antes, en 2020, compitiendo con licencia de la Federación Española en Dresde, Alemania, en un control antidopaje por sorpresa se encontró en su muestra restos de un medicamento para el asma, sancionable según el código AMA. La sanción no llegó a materializarse por dilación en la notificación del positivo a los organismos correspondientes.