El Girona no afloja en Cádiz

Si alguien se pensaba que tras la derrota contra el Real Madrid el Girona se empezaría a deshinchar, iba muy equivocado. Los de Míchel se han rehecho de la mejor manera con una trabajada victoria en el campo del Cádiz que los sitúa, provisionalmente líderes, a la espera del que haga el Madrid esta tarde.

Un gol de Aleix Garcia en la segunda parte ha servido para deshacer un equilibrio que parecía que tenía que ser fácil a raíz de la expulsión de Machís (m.10). Aun así, ha costado romper la telaraña defensiva del Cádiz en un día en que los gerundenses no han tenido la serenidad otros partidos, pero les ha servido para llevarse los tres puntos.

Roja a Machís

El árbitro fue el gran protagonista de los primeros minutos de un partido que empezó de lo más movido en cuanto a tarjetas. Después de una amarilla a Alcaraz y otra a Aleix Garcia, Martínez Munuera envió a los vestuarios Machís por una dura entrada a Yangel Herrera en medio del campo. El jugador local se pasó de frenada con la pierna levantada y dejó su equipo en inferioridad.

Con un hombre más antes del cuarto de hora de juego, el partido tenía que hacer bajada para el Girona, que tenía la oportunidad de exhibirse si era capaz de encontrar el juego que había hecho durante este gran inicio de temporada. Aun así, los de Míchel, precipitados con la pelota y afectados por las paradas constantes del juego que buscaba el Cádiz, no lo supieron hacer.

Un par de cabezazos forzados de Yangel Herrera fueron las aproximaciones más peligrosas de un Girona que pidió un penalti de Fali a Dovbyk que ni el árbitro ni lo VAR quisieron considerar y que las imágenes demostraron que lo era.

Ya a la reanudación, el Girona ha tenido más paciencia en la hora de atacar y lo ha probado en muchos lanzamientos desde fuera el área. En uno, Aleix Garcia ha encontrado el camino del gol. A partir de aquí, los de Míchel habrían podido sentenciar con acciones de Pablo Torre y Èric Garcia. No lo han hecho y han acabado sufriendo con la avalancha de pelotas colgadas a la olla del Cádiz que no han tenido consecuencias.