Caso Rubiales

El juez interroga a Rubiales este viernes por la agresión sexual y coacciones a Jenni Hermoso

La citación supone la imputación formal del dimitido expresidente de la Real Federación Española de Fútbol

El juez cita este viernes a Rubiales para declarar como investigado.

El juez cita este viernes a Rubiales para declarar como investigado. / EFE

Cristina Gallardo

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El juez de la Audiencia Nacional Francisco de Jorge ha citado al expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) 

Luis Rubiales

 el próximo viernes, para interrogarle en calidad de investigado en el procedimiento abierto por su beso a la jugadora de fútbol femenino Jennifer Hermoso durante la final del pasado Mundial celebrado en Australia.

El juez ha acordado esta diligencia en una providencia una vez admitida a trámite la querella de la Fiscalía contra Rubiales por los delitos de 

agresión sexual

y coacciones.

En el auto de admisión, el titular del Juzgado Central de Instrucción número 1 acordó las primeras diligencias en este procedimiento, entre ellas recabar de RTVE, El País, La Vanguardia y el diario As diferentes vídeos que recojen el momento del beso a la jugadora "desde todos los ángulos", así como las celebraciones posteriores.

En los fundamentos de derecho de su resolución el magistrado ya señalaba que la querella presentada por la teniente fiscal, Marta Durántez relata acciones que podrían ser constitutivas de delito y apuntaba que el asunto es competencia de la Audiencia Nacional puesto que son hechos acaecidos fuera del territorio nacional y que involucran a españoles.

Hostigamiento "constante"

En su resolución, el juez se detenía en lo señalado por en su escrito la Fiscalía sobre el delito de coacciones. Según el Ministerio Público, durante su declaración Hermoso refirió que tanto ella como su familia y personas más cercanas sufrieron una presión constante y reiterada por parte de Luis Rubiales y el entorno profesional de este, para que justificara y aprobara los hechos, lo que el

Ministerio Público

considera que puede ser considerado un hostigamiento castigado con hasta tres años de prisión. La querella añadía que esa presión se produjo "en contra del desarrollo de la vida en paz, tranquilidad y libremente" de la jugadora.

Denuncias de 'hackeo'

Por otro lado ha trascendido, sin que hasta el momento haya tenido ninguna incidencia en el procedimiento judicial, que Hermoso podría haber sufrido el 'hackeo' de su teléfono móvil para tener el acceso a fotos y vídeos que le comprometiesen y que ayudasen a defender al expresidente, según ha manifestado en una entrevista al diario aleman Der Spiegel la histórica jugadora de la selección y excompañera de la denunciante Vero Boquete.

Los hechos concretos por los que se interrogará a Rubiales son el beso que dio a Hermoso "mientras agarraba con las dos manos la cabeza (...) sin el consentimiento de ésta", según la querella de la Fiscalía, además de la "la presión constante y reiterada" que tanto la jugadora como su entorno más próximo --familiares y amistades-- sufrieron por parte del presidente de la Federación "con la finalidad de que, públicamente, justificara y aprobara el acto cometido contra su voluntad".

Por el momento, tanto ante la Asamblea celebrada en la sede de la Federación el pasado 25 de agosto como en posteriores intervenciones públicas, Rubiales ha negado que su acción se desarrollara sin el consentimiento de la jugadora, así como cualquier ánimo lúbrico al comparar el beso en la boca a Hermoso con el que pudiera dar a una de sus hijas.

La querella de la Fiscalía que ha dado origen a este procedimiento se presentó después de que el pasado 5 de septiembre Hermoso compareciera y formalizara su denuncia ante la Fiscalía, que la había emplazado previamente para ello. La decisión de la Fiscalía se asentaba en las "manifestaciones públicas" realizadas por la jugadora, de las que se podía deducir que el acto sexual sufrido por la misma y llevado a cabo por Rubiales no fue consentido".