Asier Martínez estrena el casillero de medallas para España con un bronce en 110 metros vallas en el Mundial de atletismo

Asier Martínez se apunta el primer metal que estrena el medallero español en este Mundial, al lograr un bronce en la final de 110 vallas, superando un thriller atlético que el navarro de 22 años supo aprovechar para subir al podio en compañía de dos atletas estadounidenses.

Martínez supo sacar tajada de una final atípica. Como Devon Allen, otro atleta que ha pasado por el fútbol americano y que hace un mes había rondado el récord mundial de la especialidad, no aguantó en los tacos de salida lo suficiente y fue descalificado al comprobar que su tiempo de reacción, 0,099 milésimas, señalaba una milésima menos de lo permitido. Solo una. Allen protestó, pero los jueces no cedieron y de pronto la final de 110 vallas con supuestamente ocho atletas en la salida se quedó con tan solo seis contendientes. Media hora antes, el jamaicano Hansle Parchment se había lesionado en el calentamiento y no estaba en la salida. 

Tanto el estadounidense como el jamaicano acreditan mejores marcas que el navarro, que veía como se despejaba la final, aunque más tarde explicaría que "aún no asimilo lo que ha ocurrido. Hay un momento, un microsegundo antes de la carrera en que relaciono la retirada de Parchment y la salida nula de Allen, en el que visualizo no una medalla, sino un puesto más agradable para mi, ahí le pongo más ganas e intento sacar la mejor carrera posible para acceder a esas plazas un poco más difíciles¨.

Salida entusiasta

Martínez salió con tantas ganas que pateó la primera valla sin contemplaciones, como siempre, y comienza a rebasar las siguientes sin tocarlas, corriendo de menos a más, también como siempre, se sitúa enseguida quinto, a media recta cuarto, tercero antes de la parilla de meta y finalmente bronce con 13.17 segundos su mejor marca personal.

Ganó el campeón mundial y plusmarquista de los 60 metros vallas, Grant Holloway (13,03s), desquitándose de su decepción olímpica, y segundo fue su compatriota Trey Cunningham (13,08s), inalcanzables para el español, que de paso anotó un nuevo récord nacional sub23. 

Hijo de madre vallista, el zizutarra, estudiante de Ciencias Políticas en Deusto, agradeció a su entrenador, Francois Beoringyan, un ex saltador de altura nacido en Chad y afincado en Pamplona desde hace un par de décadas, su dedicación y sus esfuerzos para poder conseguir un visado de entrada en los Estados Unidos y acompañarle en un momento tan decisivo de su carrera deportiva.

"Antes de venir firmaba la final muy contento. De hecho, superar las semifinales me había dejado ya muy tranquilo porque había cumplido de sobra. Ahora tener una medalla es increíble. No sé cómo describir este momento, aún no me lo creo", concluyó Asier.