el adiós de la estrella azulgrana

Laporta: "El Barça está por encima de Messi, no voy a hipotecarlo por nadie"

"Hace dos dias que llegué a la conclusión que esto ya no daba por más"

El presidente anuncia 487 millones de pérdidas del último ejercicio

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Los posibles destinos de Messi

"La gestión calamitosa de la junta anterior excedió la masa salarial y no hemos tenido tiempo de reconducir esta situación", afirma el presidente

Laporta admite que la renovación de Messi hubiera puesto en riesgo al club

Laporta admite que la renovación de Messi hubiera puesto en riesgo al club. /

Joan Domènech

Joan Domènech

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Cinco días después de confesar que tenía "dulces sueños" con la renovación de Lionel Messi, Joan Laporta pasó una de sus peores pesadillas como presidente del FC Barcelona. No solo la de despedir al icono contemporáneo del club azulgrana, al hombre récord de todos los apartados futbolísticos, sino la de tratar de explicar los motivos de su marcha, por más que ya hubiera acabado su contrato el pasado 30 de junio. El trago de comparecer se agravaba por el hecho de que el propio Laporta y todas las esferas del club daban por renovado al delantero argentino y a punto de firmar el nuevo compromiso final. Y todo se rompió a última hora.

"Hemos recibido una herencia nefasta y los números son peores de lo que podíamos suponer", expuso Laporta, achacando además que las restricciones de la masa salarial impuesta a la Liga no daba cabida a la inscripción de la estrella argentina pese a que hubiera rebajado su salario.

Ningún reproche a Leo

El presidente no tiene ningún reproche hacia el capitán, de quien presume que está "triste y decepcionado" como se sentía él. "Ha hecho todo lo que podía y más para seguir", garantizó Laporta. "Messi se enfrenta ahora a la realidad, como nosotros. Una realidad que no se puede cambiar. Él ya sabe que le deseamos lo mejor y que el Barça será casa; ha engrandecido a la institución y el palmarés como nadie". Ahora queda pendiente la organización un homenaje después de 20 años vistiendo de azulgrana. Desde diciembre de 2000.

"Cuando hemos conocido a fondo la situación del club, no queríamos poner más en riesgo a la institución. La entidad está por encima de Messi, de jugadores, de entrenadores y de presidentes", dijo el máximo dirigente azulgrana, insistiendo en que la "gestión calamitosa" de la junta de Josep Maria Bartomeu excedió la masa salarial hasta unos límites inasumibles "y no hemos tenido tiempo de reconducir esta situación".

Joan Laporta, en el Auditori 1899.

Joan Laporta, en el Auditori 1899. / EL PERIÓDICO

Pérdidas de 487 millones

Laporta ha anunciado unas pérdidas de 487 millones del último ejercicio tras conocer las primeras conclusiones de las due dilligences encargadas. "Lo que no haré es poner el retrovisor, pero tampoco seré cooperador necesario de acciones incorrectas y presuntamente delictivas", dijo, en referencia a las sorpresas "y agujeros negros que vamos encontrando" a través de las auditorías.

"Teníamos que tomar una decisión y la he tomado", ha señalado Laporta, asumiendo la responsabilidad de ser quien oficie la despedida de Lionel Messi. "Nosotros queríamos que la etapa post-Messi empezara dentro de dos años, pero lo hemos tenido que adelantar dos años antes de lo previsto", admitió y sin querer dar "falsas esperanzas" de que la situación pudiera reconducirse.

"Nosotros queríamos que la etapa post-Messi empezara dentro de dos años, pero la hemos tenido que adelantar dos años antes de lo previsto"

— Joan Laporta

El presidente azulgrana se confesó triste y decepcionado y afirmó que no tiene "ningún reproche" hacia Messi ni a su padre Jorge, con quienes alcanzó un acuerdo "que no ha podido formalizarse" dentro de los márgenes fijados por laLiga. Laporta aventuró que habría dispuesto a correr cierto riesgo, pero tenía muy claro también que "el Barça está por encima del mejor jugador del mundo" y que no iba a hipotecar el Barça "por nadie".

Nace un Barça sin Messi y ese vacío lo tendrán que llenar entre todos. Laporta acudió a la ciudad deportiva para reunirse con los capitanes (Sergio Busquets, Gerard Piqué y Sergi Roberto) y luego con el resto de la plantilla para darles la pésima noticia y para implicarles en la nueva era que afronta el equipo.

No empieza precisamente una etapa de transición: "Empieza una etapa que ha de ser esplendorosa, una oportunidad histórica de ganar títulos sin el mejor futbolista del mundo". Laporta anunció que se exigirá la máxima "profesionalidad" y pidió a los veteranos la "máxima implicación" y un esfuerzo añadido para que en el vestuario haya "compromiso y espíritu de equipo" y consigan "la integración de los jóvenes". A cambio, el presidente garantiza al grupo "el máximo apoyo" de todos los estamentos del club. Todo en grado máximo, superlativo.

"Empieza una etapa que ha de ser esplendorosa, una oportunidad histórica de ganar títulos sin el mejor futbolista del mundo"

— Joan Laporta

Durante la rueda de prensa le han leído el tuit que había mandado Tebas, en el que negaba que el acuerdo con CVC hipoteque medio siglo al club. "Hola Javier. Esta operación, como bien tú sabes, conlleva cierto riesgo que no quiero asumir como presidente del Barça. Las operaciones a medio siglo no debemos hacerlas. Además, queridísimo Javier, el 10% de LaLiga tiene un valor mucho mayor", le ha contestado al presidente de LaLiga.

Laporta, en las presentaciones de Memphis y Emerson, repetía que la renovación "progresa adecuadamente porque parecía que LaLiga iba a ampliar el 'fairplay' y habíamos llegado a un acuerdo con el jugador". Pero el tiempo transcurría sin que pudiera plasmarse el acuerdo y llegó el momento "en el que te tienes que plantar". Fue el miércoles y se confirmó el jueves. "No se podía seguir con esto y teníamos que tomar una decisión. No ha aclarado en su intervención si ha hablado con el jugador. "Leo no está contento. Él quería quedarse y nos lo trasladó, por este motivo no está contento. Me gustaría decir que el Barça es su casa, Messi ha engrandecido a la institución y al club. Siempre le estaremos agradecido".

La regla del 4 a 1

El mandatario barcelonista ha relatado la fórmula que debía seguir el club para cumplir con el 'fair play'. "Para que os hagáis una idea es que el límite salarial que podríamos afrontar es con la regla 4 a 1. Para tener 25 millones de salario tenemos que liberar 100. Eso son muchos jugadores". Pese a no poder inscribir a Messi, Laporta confía en poder hacerlo con Emerson, Memphis, Èric Garcia y Agüero. "La masa salarial sin Leo será del 95% de los ingresos totales del club. La cifra adecuada es el 60-65%. Esto significa que los nuevos fichajes, al tener fichas menores a la del delantero, podrían ser inscritos. Pero, aunque ya lo estamos haciendo, habrá que reducir más esta masa". El Barça aspira en esta temporada 2021-22 a rebajar este límite al 75%; es decir, que el coste de las nóminas deportivas ocupen en 75% de los ingresos.

Se va Messi y deja un vacío cuyas dimensiones se verán durante el transcurso de la temporada. Es muy superior ese agujero que el de un futbolista que "garantiza 30 goles por temporada", como decía Ronald Koeman hace meses. La plantilla no está cerrada, ahora mucho menos, y habrá fichajes.