Más riesgo que nunca en el Bernabéu

Al margen de la atmósfera de temor que han provocado los atentados terroristas de París, la Comisión Antiviolencia tenía previsto declarar el Real Madrid-Barcelona del sábado partido de alto riesgo. Lo hará mañana miércoles y el jueves se reunirá la comisión que concretará el dispositivo de seguridad. En dicha comisión habrá representación de la Delegación del Gobierno, Ayuntamiento, Policía Nacional y club blanco y, según ha adelantado la delegada del Gobierno, Concepción Dancausa, se tomarán medidas añadidas a las habituales en los encuentros declarados de alto riesgo. A lo largo de la semana ya se han producido contactos entre el Comité de Seguridad de la Liga de Fútbol Profesional y la Comisión Antiviolencia que se han traducido en una presencia policial mucho mayor de la habitual desde el pasado fin de semana en los alrededores del estadio madridista, con controles de identificación de vehículos y agentes con perros para detectar explosivos.

Más de 1000 agentes de policía y seguridad privada serán desplegados el sábado y por primera vez se establecerán tres anillos de seguridad. En el primero de ellos se exigirá a los aficionados que muestren sus entradas personalizadas con la finalidad de impedir que aquellos que no dispongan de localidad puedan moverse por las cercanías del recinto. Las medidas incluirán la recomendación a los aficionados para que lleguen al estadio con al menos dos horas de antelación para evitar aglomeraciones y facilitar el funcionamiento de los controles. Antes llegarán los aficionados del Barcelona, que entrarán al Bernabéu cuando aún esté cerrado para los seguidores madridistas.

NO A LA SUSPENSIÓN DEL CLÁSICO

"Se examinarán hasta los bocadillos", dijo la delegada el Gobierno en Madrid, lo que remitió a las maniobras que varios hinchas del Benfica llevaron a cabo el 1 de octubre para introducir bengalas en el Vicente Calderón. "Si yo fuera del Madrid o del Barça iría a ver el partido sabiendo que toda nuestra gente está al quite de las cosas", ha declarado este martes el delegado de salud, seguridad y emergencias de Madrid, Javier Barbero, que ha explicado que se mantiene el mismo nivel de alerta, el 4, "porque la idea es colaboración absoluta en todas las medidas preventivas".

En esa línea se ha manifestado también el secretario de Estado para el deporte, Miguel Cardenal, quien, tras la entrega de los Premios Nacionales del Deporte, ha dicho entender "la alarma tan brutal que produce un ataque como el de París", pero ha añadido que en España no concurren circunstancias que aconsejen suspender el clásico. De manera excepcional, Cardenal presidirá la reunión de la Comisión Antiviolencia, junto con el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez Vázquez. Minutos antes, uno de los galardonados, el ciclista Nairo Quintana, había declarado que él no iría al clásico "porque es un poco arriesgado".