PERFIL

Clint Eastwood: el cineasta inagotable

A punto de cumplir 89 años, el actor y director vuelve a la carga con 'Mula', sobre un veterano de guerra que acaba pasando droga por la frontera para un cartel mexicano

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Quim Casas

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Clint Eastwood cumplirá 89 años el próximo 31 de mayo. Acaba de estrenar 'Mula', su película número 37 como director y la 60 como actor. En 'Mula', el cineasta vuelve a colocarse a uno y otro lado de la cámara, algo que no hacía desde que dirigiera y protagonizara 'Gran Torino' en el 2008. Aquella película tenía como protagonista a un exveterano de la guerra de Corea en precaria situación económica en unos Estados Unidos convulsos. Allí fue el racismo hacia los asiáticos. En 'Mula' es el narcotráfico. A su modo, y pese a sus simpatías republicanas, Eastwood ha ido trazando un retrato bastante acre del país, lo gobernaran Bush o Obama, lo gobierne Donald Trump.

89 años. Se dice pronto. Porque Eastwood continúa firmando una película cada año y algunas de ellas son de compleja logística de producción. Ya es el director más veterano en activo, porque Woody Allen tiene cinco años menos que él y Jean-Luc Godard no cumplirá los 89 hasta el 3 de diciembre de este año. Si con la vejez se es más sabio, en el caso de estos cineastas se es también más productivo. 

Las películas que ha protagonizado en las tres últimas décadas son sobre personajes desclasados, del pistolero de 'Sin perdón' al entrenador de boxeo de 'Million Dollar Baby'. La sensación es que dirigió estas películas porque quería también interpretarlas. Es sabido que guardó en el cajón durante 10 años el guion de 'Sin perdón'. ¿El motivo? Quería envejecer lo suficiente para encarnar al protagonista, y no hizo la película hasta que no tenía la edad y el físico de Bill Mummy, el antiguo forajido que debe volver a cabalgar y disparar cuando no tiene fuerzas para ello. 

Cartel mexicano

Lo mismo podríamos decir de 'Mula'. La historia está inspirada en el caso real de Leo Sharp, un veterano de la segunda guerra mundial que acabó convirtiéndose en 'mula' de un cartel mexicano de la droga. Una 'mula' es aquel que pasa las drogas por aeropuertos o puestos fronterizos escondida en su cuerpo, la maleta o, en el presente caso, en la parte trasera de su camioneta. Sharp se convierte en el filme en Earl Stone, un horticultor divorciado y acuciado por las deudas que, por su avanzada edad, no debería despertar sospechas en los controles policiales. 

La historia, 
basada en un 
hecho real, aporta
una nueva arista
al áspero retrato
que va trazando 
de su país 

En el trasvase de la realidad a la ficción, Sharp, ahora Stone, apenas se habla con su exesposa y aún menos con su hija. Las disputas entre padres e hijas son recurrentes en la obra de Eastwood. El hecho de que la hija de Stone esté encarnada por la propia hija del cineasta, Alison Eastwood, le otorga un plus de verdad. Hay algún cambio relevante, como el de que Stone combatiera en Corea en vez de contra los nazis, quizá porque Eastwood, por edad, no participó en la segunda contienda mundial pero sí estuvo destinado en una base militar durante el conflicto de Corea, aunque solo en calidad de instructor de natación.

'Mula' puede verse como la prolongación de 'Gran Torino', algo a lo que no es ajeno la repetición del mismo guionista, Nick Schenk, alguien que además domina el tema del tráfico de drogas porque ha escrito varios episodios de la serie 'Narcos'. El cuerpo de Eastwood es 10 años mayor, pero se conserva muy bien. También su mirada como director tiene 10 años más y, sin ser incisiva, tampoco es complaciente.

La realidad

El cineasta vuelve a inspirarse en la realidad. Debe de tener un equipo de colaboradores que le buscan noticias interesantes. De sus últimos ocho largometrajes, siete son 'biopics' o están basados en hechos reales. Además de 'Mula', están 'Invictus', sobre Nelson Mandela y la final de la copa mundial de rugby en Sudáfrica; 'J. Edgard', que relata la vida del creador del FBI; 'Jersey Boys' hace lo propio con el grupo musical Frankie Walli and the Four Seasons; 'El francotirador' gira en torno al soldado norteamericano que causó más bajas en la guerra de Irak; 'Sully' explica la historia del piloto aéreo Chesley Sullenberger, quien logró aterrizar su avión averiado en el neoyorquino río Hudson, y '15:17 Tren a París' reconstruye el enfrentamiento entre tres jóvenes estadounidenses y un terrorista islámico en un tren, con la particularidad de que los tres protagonistas reales se interpretan a sí mismos.

Eastwood ya había hecho un 'biopic' del saxofonista de jazz Charlie Parker ('Bird') y recreó el rodaje de 'La reina de África' y la obsesión de su director, John Huston, por cazar un elefante ('Cazador negro, corazón blanco'). Se siente cómodo realizando ficciones a partir de la realidad, sea más conocida, relevante o localista. Y así va trazando el mapa de su país sin dar, por el momento, señales de agotamiento.