La peculiar forma de descansar de los pingüinos antárticos

Los pingüinos barbijo son una especie que habita en la Antártida y, por ello, se les conoce también como los pingüinos antárticos. Son animales que viven en condiciones extremas, por lo que deben adaptarse a las situaciones de profundo frío.

Entre otras cosas, los animales adultos realizan largos desplazamientos en busca de alimentos, mientras que el resto de pingüinos se quedan en la retaguardia, cuidando y protegiendo a los huevos y sus crías.

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Para poder descansar sin perder de vista su entorno y del posible ataque de alguno de sus depredadores, como las orcas y las focas leopardo, estos animales han desarrollado una peculiar forma de dormir: las microsiestas, que son períodos de sueño muy cortos, de apenas 4 segundos.

Esta técnica ha sido estudiada por investigadores de la Asociación Americana para el Avance de la Ciencia, quienes han publicado las conclusiones del estudio en la revista Science, donde explica cómo funcionan estos períodos de descanso.

Según el artículo, los pingüinos barbijo duermen las microsiestsas de pie, con los ojos abiertos y la cabeza erguida. En ese tiempo, su actividad cerebral se reduce al mínimo, pero siguen siendo capaces de detectar cualquier movimiento a su alrededor.

Acumulan 11 de horas con esta técnica

Este proceso, que dura unos 4 segundos, se repite unas 600 veces cada hora y más de 10.000 al día, según han revelado los expertos. También apuntan que con estos descansos acumulan 11 de horas de sueño, lo necesario para reponer energía para todo el día.

De hecho, las microsiestas también se dan entre los humanos, así que seguramente alguna vez has experimentado esta sensación de estar dormido, pero presente, durante unos escasos segundos.

Lo cierto es que esta estrategia les permite salvaguardar su descendencia, por lo que, según los investigadores, las microsiestas son vitales para la supervivencia de la especie y es uno de los factores que explicaría su éxito evolutivo.

¿Por qué los pingüinos duermen de pie?

Los pingüinos duermen de pie por diversos motivos. En primer lugar, estar en posición vertical les permite mantener una buena visión de su entorno y estar alerta ante cualquier peligro.

En segundo lugar, les ayuda a conservar el calor, ya que los pingüinos tienen un metabolismo muy acelerado, por lo que necesitan mantener el calor para sobrevivir en las frías aguas de la Antártida.