Legión de fieles

Sta. Fe, 'ssams' y 'rolls' divinos

Este restaurante junto a la iglesia de Sant Gregori Taumaturg mueve montañas de parroquianos en busca de estos bocados asiáticos y otros platillos más clásicos, bien elaborados y de sabores potentes

Dos 'ssams' de ventresca de atún del restaurante Sta. Fe.

Dos 'ssams' de ventresca de atún del restaurante Sta. Fe.

Ferran Imedio

Ferran Imedio

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[Este restaurante ha cerrado]

Resulta difícil de entender cómo en el corazón de la zona alta de Barcelona, siempre acomodada en los gustos más clásicos, un restaurante especializado en 'ssams' y 'rolls' ha seducido a los paladares más conservadores. Pero visitando Sta. Fe, que así se llama este establecimiento junto a la iglesia de Sant Gregori Taumaturg, es fácil comprender el por qué de tanto parroquiano. Hasta el punto que acaban de ampliar el local. Tal es el éxito de este negocio que viene a ser primo hermano de Ébano (Bellaterra).

Podría decirse que Sta. Fe mueve montañas (gastronómicas). Y no solo por esos 'ssams' (un bocado coreano que consiste en una hoja de lechuga sobre la que se colocan elaboraciones de todo tipo como pulpo con mayonesa de 'kimchi' o de ventresca de atún con mayonesa de 'wasabi') y por esos 'rolls' (aquí con pan de brioche relleno de bogavante con mostaza o de panceta 'teriyaki').

'Roll' de bogavante del restaurante Sta. Fe.

'Roll' de bogavante del restaurante Sta. Fe. /

Ensaladilla rusa picante y bikini trufado

También por otros platos divinos como la ensaladilla rusa de langostino un punto picante que ha creado una legión de fieles, igual que el bikini trufado de mozzarella y jamón ibérico, nada novedoso en la ciudad pero sí muy rico.

Sta. Fe da acceso al paraíso también con platos notables como el 'tartar' de tomate, que es puro trampantojo pues parece un 'steak tartar', y sabe como tal (¿se le podría llamar 'trampanboca' también?), y las sugerencias del chef, que el día de nuestra visita era un 'tartar' de lubina salvaje con gambas de Arenys. 

En definitiva, elaboraciones trabajadas, sabores con personalidad, presentaciones delicadas y elegantes... Como gusta por estos lares. Da igual que sean en forma de 'ssam' o de ensaladilla rusa.

No hay menú y el precio medio ronda los 35 euros.

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