Huelga de bibliotecas en Barcelona: estas son las movilizaciones y protestas convocadas este lunes

Las bibliotecas de Barcelona harán huelga la víspera de Sant Jordi: "Queremos horarios que permitan la conciliación"

Biblioteca García Márquez.

Biblioteca García Márquez. / FERRAN NADEU

Aleix Voltà

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Las bibliotecas de Barcelona han convocado una huelga para este lunes, 22 de abril. La agrupación Defensem Biblioteques de Barcelona, que busca defender al personal bibliotecario de la ciudad, ya avisó de la convocatoria de huelga la semana pasada.

La convocatoria se ha realizado para expresar el malestar de los bibliotecarios por sus condiciones laborales y por una nueva planificación horaria que, de aplicarse, haría imposible la conciliación laboral entre trabajadores y organización laboral.

Cierre de las bibliotecas

Esta mañana, ninguna de las 11 bibliotecas que debía abrir en la ciudad de Barcelona lo ha hecho. Además de no abrir por la mañana, se han montado piquetes para impedir el acceso y se han producido manifestaciones, como en el caso de la biblioteca García Márquez, en el distrito de Sant Martí, escogida el año pasado como la mejor biblioteca pública del mundo.

A las 12.30 horas se ha celebrado una segunda concentración en el Consorci de Biblioteques. Por la tarde, momento en el que la mayoría de librerías de la ciudad deberían abrir, se ha convocado una asamblea en el Centre Cívic Convent de Sant Agustí, en Ciutat Vella.

La huelga coincide con el pregón de Sant Jordi de este año, a cargo del escritor y actor británico David Walliams, previsto para las 18.00 horas en El Born Centre de Cultura i Memòria. Una hora antes, a las 17.00 horas, el personal bibliotecario reivindicará la huelga con un acto en el mismo centro cultural, ubicado en el número 12 de la Plaça Comercial, en Ciutat Vella.

Reacciones

A la espera de cómo se desarrolle la jornada de huelga por la tarde, varias formaciones y sindicatos, como por ejemplo la CUP, se han hecho eco de la huelga y han mostrado su apoyo a los trabajadores.

El personal de la biblioteca pide más mantenimiento y "menos medallitas" por parte de políticos y la Administración. Los bibliotecarios alegan que no pueden "sostener un servicio de calidad sin la conciliación del personal".