La Estació del Nord releva a la Ciutadella en la Mercè con nueve escenarios

El parque de la Estació del Nord toma el relevo de la Ciutadella como epicentro de la Mercè Art de Carrer (MAC) con la mayor de las ambiciones, con hasta nueve escenarios distintos en los que disfrutar, en palabras del alma de la programación, Marta Almirall, de espectáculos a veces gamberros, en otras ocasiones transgresores, siempre que sea possible humorísticos y, como mínimo denominador común, siempre de un alta calidad artística. “El arte es tomar riesgos”, dice Almirall sobre la decisión de cerrar la etapa de la Ciutadella y abrir una nueva en un parque que urbanísticamente es, en honor a la verdad, mucho más versátil para encontrar el lugar adecuado para número.

Serán 300 las actuaciones que se podran ver a lo largo de la Mercè junto a la Estació del Nord, espectáculos de 61 compañías, con una presencia mucho más que testimonial de grupos procedentes de Kiev, la ciudad invitada este año. En cierto modo, será una oportunidad de que el público sea testigo de cómo era la envidiable vida cultural de Ucrania antes de la guerra, con bailarines de danza contemporánea como los de la companyia Apache Crew.

La Mercè renueva este año parcialmente las direcciones postales del MAC conocidas por todos y, a su manera, crece. Es MAC la programación circense del Castell de Montjuïc y también la familiar del parque de Joan Miró (donde este año están previstos incluso números de baja intesidad sonora para ninos con autismo), pero lo más llamativo sea, tal vez, la interconexión. A través de la tecnologia, según Almirall, el público de Joan Miró tendrá una visión de lo que està sucediendo en la Estació del Nord para que, cuando en la Esquerra de l’Eixample se apaguen los focos, se trasladen a Fort Pienc, en el otro extremo del distrito.

Según cuentan, los artistes de la la ciudad invitada están maravillados ante el hecho de que la fiesta mayor de Barcelona se extienda realmente de punta a punta de la ciudad de Barcelona, con la novedad de que este año se pretende que, además de estar aquí o allí, se pasee, o sea, que el público sea como aquel artista de una canción de Radio Futura que “al andar descubrió la maravilla del sonido de sus propios pasos en la gravilla”.

Hasta la renovada calle de Consell de Cent será este año, con horarios y espectáculos sorpresa, parte del MAC, pero el epicentro, lo dicho, será el parque de la Estació del Nord, con una variedad de escenarios imposible en la Ciutadella, penalitzada este año por diversas obres. Bajo los puentes, opina Almirall, algunos espectáculos adquiriran un cierto aire neoyorquino o berlinés que agrada mucho a los artistes. Luego está la zona pavimentada, junto a la fachada lateral de la estación, ideal para números imposibles sobre tierra.

Conviene entretenerse en el programa de la Mercè, disponible a través de una cada vez más ágil aplicación de telefonia móvil. Son los tiempos que corren, hasta tal punto que durante la presentación del MAC ha sido posible catar un aperitivo de uno de los epectáculos, de las mallorquinas Unaiuna. Bailan con, cómo no, un teléfono en las manos, con el que una de elles van tomando ‘selfies’ cada dos por tres. La gracia añadida es que en la otra punta del parque, la otra mitad de Unaiuna hace lo mismo y el público puede disfrutar de ese intercambio de narcisismos tan común en la actualidad.