El PSC responde a Valls: "Nuestro candidato es Collboni"

Los socialistas rechazan la propuesta del exprimer ministro francés de crear una plataforma unitaria

Salvador Illa durante la rueda de prensa en la sede del PSC.

Salvador Illa durante la rueda de prensa en la sede del PSC. / periodico

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El PSC muy poco ha tardado en meditar y responder a la condición que el exprimer ministro francés Manuel Valls ha puesto sobre la mesa para ser candidato a la alcaldía de Barcelona. Pretende Valls, como ha explicado él mismo el pasado fin de semana, encabezar una lista unitaria en la que confluyan las fuerzas de Ciudadanos, los socialistas y el PP. El candidato del PSC, según su secretario de organización, Salvador Illa, es Jaume Collboni. La respuesta, de manual, no se la ha tomado nada bien Albert Rivera, que ha echado mano también (valga la redundancia) del manual naranja para este tipo de situaciones y ha acusado a los socialistas de “estar más cómodos apoyando a nacionalistas y populistas que sumando con los constitucionalistas”. Si Valls pretendía tender algún puente, Rivera ha dinamitado ya de entrada los pilares.

La batalla por Barcelona, para la que faltan poco menos de 13 meses, se prevé enormemente tensa, pero aún es muy incierta. Ciudadanos busca un candidato, Valls deja querer, el PP se expone a quedar fuera del consistorio y el PSC no solo mira con inquietud el ascenso del partido de Rivera en barrios que antaño eran su feudo, sino que además teme que una candidatura unitaria no haría más que propiciar que ocurriera lo mismo en el otro frente y que, tras otra cara conocida, se aglutinara todo el independentismo.

El PSOE no discrepa

Según Illa, “parece que hay algo que no ha funcionado” en el planteamiento inicial de Rivera. “Nos parece todo un punto contradictorio. No entendemos que una persona que se presenta en primer término con Ciudadanos, luego apele a una lista unitaria”, ha explicado el secretario de organización. Desde la perspectiva de Valls, la falta de respaldo puede ser frustrante e, incluso, deshinchar sus ánimos. Desde la perspectiva de Rivera, sin embargo, la ocurrido parece más bien una oportunidad de retratar como melifluos a los socialistas ante la posibilidad de evitar un gobierno independentista en Barcelona o una reedición del mandato de Ada Colau.

Tampoco el PSOE está por la labor. Su secretario de organización, José Luis Ábalos, ha desdeñado como una simple “operación de márketing”, la solución “importar políticos a los que ya se les pasó su momento y que fracasaron en su propio país”. Para Ábalos, lo normal es que el PSC presente a Collboni. “Sorprende –ha dicho en referencia a los problemas de Ciudadanos para encabezar la lista de Barcelona—que no tengan políticos catalanes en activo que entiendan, que vivan y que sufran incluso la realidad de Catalunya”.