Primera noche sin incidentes en Sants

El barrio barcelonés de Sants ha vivido hoy su primera noche sin incidentes violentos desde que el pasado lunes fue desalojado el inmueble de Can Vies, okupado desde hace 17 años y que funcionaba como un centro social autogestionado. Unas 500 personas se han congregado este viernes en la plaza de Sants de Barcelona para celebrar una nueva cacerolada en protesta por el desalojo y derribo del centro de Can Vies. La concentración se ha realizado en un ambiente festivo, con personas de todas las edades y una discreta presencia policial, mientras numerosos vecinos han secundado la acción desde balcones y ventanas golpeando distintos utensilios. La plaza ha sido cortada al tráfico, y al término de la protesta, unas cien personas han participado en un micrófono abierto y se ha vuelto a leer el comunicado difundido esta mañana desde Can Batlló, informa Antonio Baquero.

Este mismo viernes, el Ayuntamiento de Barcelona ha paralizado la demolición de Can Vies atendiendo a la petición del Centre Social de Sants, para "favorecer un clima de diálogo". También ha manifestado de nuevo "su rechazo más enérgico a los disturbios y violencia que se han vivido en los últimos días", unos incidentes que califica de "absolutamente injustificables". Además, el Govern municipal pide el cese de "los disturbios y que cualquier protesta o convocatoria que se quiera celebrar en la ciudad se haga de manera pacífica.

Sin embargo, el colectivo que gestiona el centro de Can Vies ha lanzado en una rueda de prensa que se ha celebrado en el recinto de Can Batlló este viernes por la mañana ha exigido la dimisión del alcalde Xavier Trias y del concejal del distrito de Sants-Montjuïc, Jordi Martí. También han asegurado que "no quieren negociar" nada con el consistorio y han pedido la liberación de los detenidos sin ningún tipo de cargos. Desde el inicio de los disturbios han sido detenidas 61 personas, de las que una ha ingresado en prisión, y a otras se les ha impuesto la prohibición de asistir a manifestaciones

El Ayuntamiento de Barcelona ha remitido también este viernes un informe técnico en el que advierte a diversas entidades vinculadas con Can Vies de los riesgos que entraña acceder al edificio, parcialmente derribado el pasado lunes. Por este motivo se ha instalado un cierre ligero en el perímetro del centro.