FIESTA MAYOR DE BARCELONA

La Mercè austera convence

La fiesta mayor cierra con 1.400.000 asistentes y consolida un programa volcado en el folclore y el arte en la calle

Tres momentos del piromusical de anoche en Barcelona.

Tres momentos del piromusical de anoche en Barcelona.

CARLOS MÁRQUEZ DANIEL
BARCELONA

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El pregón soberanista del poeta y arquitecto Joan Margarit y la cercanía electoral hicieron presagiar una Mercè de lo más politizada. Así fue hasta que las compañías de teatro, los grupos musicales, los gegants, los demonios, los castellers y los petardos hicieron enmudecer a los oportunistas de lo político y empezaron a demostrar que la fiesta mayor es, antes que nada, una de las mejores representaciones de todo el folclore artístico que nace y se deshace en Catalunya.

La Mercè más austera, la que recortó el presupuesto un 10% hasta los 3,6 millones de euros, la que redujo las actividades de 600 a 500, la que quitó del programa lo que para muchos era un ejercicio de ombliguismo municipal -la muestra de servicios públicos del paseo de Gràcia- ha congregado en tres días a cerca de 1.400.000 personas, 300.000 menos que el año pasado, cuando la fiesta duró 24 horas más.

Bajo la batuta de Marta Almirall, la Mercè 2010 ha logrado, en palabras de Jordi Martí, delegado de Cultura, «consolidar un nuevo modelo de fiesta que busca satisfacer al gran público sin renunciar a la alta calidad de las propuestas artísticas». Se refería, sobre todo, a la buena acogida del festival Mercè Arts de Carrer (150.000 asistentes), con especial mención a la «pequeña joya» del Parque de la Luz instalado en la Ciutadella, y al cuidado que, como nunca, se ha tenido en la selección de las actividades después de visionar cerca de 400 propuestas. Almirall, jefa de fiestas del ayuntamiento, no podía disimular su júbilo. «Ha salido todo redondo y además no ha caído ni una gota a pesar de las malas previsiones», celebraba.

QUITAR LO SUPERFLUO / Martí reconoció el acierto de prescindir «de todo lo superfluo y reducir el número de escenarios» y destacó la importancia de haber descongestionado el Fòrum, que este año ha compartido conciertos multitudinarios con la avenida de la Reina Maria Cristina. Habló en varias ocasiones de «fiesta mayor metropolitana», del «gran descubrimiento» del Canódromo como escenario, de la «consolidación» de las actividades del castillo de Montjuïc y de la «buenísima experiencia» de haber contado con Dakar como ciudad invitada.

En el apartado de actividades masivas, merece una mención aparte el récord de participación en el correfoc (80.000 personas), la implicación de 110.000 ciudadanos en la cabalgata o la asistencia de más 430.000 personas a los distintos escenarios musicales.

Hoy, jornada de resaca de la Mercè 2010, el ayuntamiento retomará la agenda habitual y la fiesta mayor cederá el decorado al espectáculo preelectoral.