“Y el Real Madrid qué, otra vez campeón de Europa, ¿no?”
Emilio Pérez de Rozas
Periodista
Licenciado en Ciencias de la Información por la UAB. Hijo de Carlos Pérez de Rozas, sobrino de Kike y Manolo Pérez de Rozas, integrantes de una auténtica saga de fotoperiodistas. Trabajó en Diario de Barcelona, fundador de El Periódico de Catalunya en 1978 también formó parte de la redacción en Catalunya del diario El País. Colaborador del diario deportivo Sport y vinculado al departamento de Deportes de la cadena COPE, que dirige Paco González. Emilio suele completar muchas de sus informaciones con sus propias fotos, en recuerdo a lo aprendido junto a su padre y tíos.
Era el año 1994, Jesús García Velasco, un cabrero de la pequeña localidad guadalajareña de Majaelrayo, se convirtió, por casualidad, en uno de los rostros más conocidos de la televisión española al protagonizar el anuncio del todoterreno Mitsubishi Montero.
El spot mostraba a un hombre que se perdía con su coche en lo que parece un lugar remoto, recóndito e incomunicado. Mientras el visitante repone fuerzas junto al simpático lugareño, éste le hace una serie de preguntas que, en efecto, demuestran que con aquel todoterreno se podía llegar a lugares donde hace tiempo que no llegaba nadie. Ni las noticias.
--Y dice usted, señor, que…ese Mateo….va vestido de Superman…persiguiendo a un exministro…que está casado con una china… ¿Y Franco, qué opina de eso? ¡Ah, leches!, me dijo usted que Franco había muerto.
Pero, de pronto, el cabrero mira al visitante casi conociendo la respuesta y le pregunta: “Y el Real Madrid qué, otra vez campeón de Europa, ¿no?”
La lamentable Liga del Real Madrid, que abre el camino a la conquista de la 15ª 'orejona'. O no.
Volvemos a estar en la casilla de salida, la que determina si el Real Madrid será capaz de ganar, de nuevo, la ‘orejona’, después de protagonizar uno de los mayores ridículos de su historia….en LaLiga, donde mañana, a falta de 10 jornadas, podría estar a 15 puntos del Barça.
Desde que el Girona empatase en el Bernabéu, el Real Madrid ha jugado 17 partidos de Liga y solo ha ganado 8, empatando 4 y perdiendo 5. Peor aún, el Real Madrid no ha enlazado dos títulos de Liga seguidos desde el 2008. Más peor aún, si el Atlético gana hoy en Vallecas, se colocará a dos puntos del Real Madrid, es decir, que los blancos, como se descuiden (un poco más), acaban terceros en esta Liga.
Pero recuerden el anuncio del cabrero. Al Real Madrid hace tiempo que solo le interesa la Champions (ha ganado cinco de las últimas nueve) y su único objetivo es levantar la ‘orejona’. Por eso, en Madrid, desde anoche, cuando ni un solo seguidor blanco se cortó las venas ni pitó a su equipo por perder ante el Villarreal (2-3), venden el discurso de que si el equipo de Carlo Ancelotti, que se la juega a todo o no (digo ‘Carletto’, claro), vuelve a ganar la Champions, lo que ganen los demás (incluida la Liga del Barça) no vale un pimiento.
La justificación a la derrota de anoche es múltiple pero, sobre todo, la excusa se centra, no en el partidazo que hizo el nigeriano Samu Chukwueze, de 23 años, que le costó 500.000 euros al Villarreal y cuyos padres le quemaron un día las botas porque no querían que fuese futbolista, sino en el hecho de que “no hemos sido capaces de motivarnos al 100 por 100 para un partido que caía en medio de un clásico vital y el primer partido de Champions frente al Chelsea”, reconoció ‘Carletto’, que si no gana la Champions será despedido, aunque le queda un año de contrato.
El Madrid vive en la contradicción: Champions o Superliga, Ancelotti o Xavi Alonso, Mbappé o Bellingham.
El Real Madrid, que está protagonizando una de las temporadas más raras de su vida, tratará de maquillar, de arreglarla, con su 15ª Copa de Europa. Ese Real Madrid, es decir, Florentino Pérez, el amigo de Joan Laporta, no sabe si quiere a Ancelotti o a Xavi AlonsoKylian Mbappé o a Jude Bellingham, pero sí sabe que no quiere la Champions sino la Superliga pero, mientras la ‘orejona’ se ponga a tiro, los blancos vivirán la contradicción de querer seguir siendo campeones de Europa, que parece su sino desde que la TV arrancó en blanco y negro.
Lo que anoche ocurrió en el Bernabéu ya está olvidado por todos los merengues. Quien difícilmente lo olvidará es Chukwueze (“mi segundo gol es de locos ¿verdad?”, verdad, caballero, verdad) y mucho menos Quique Setién, el entrenador que miraba las vacas cuando el Barça lo llamó, el técnico cuya cabeza pidieron, al mes de estar en Villarreal, la afición del ‘submarino amarillo’ y que anoche se convirtió en el séptimo entrenador que gana tres veces en el Bernabéu (dos con el Betis y una con el Villarreal), cosa que solo han hecho Barrios, LuisManzanoValverdeGuardiola y Simeone.
Y un detalle más: el Villarreal, con este gran triunfo, se coloca quinto en la Liga, por detrás de Barça, Real Madrid, Atlético y Real Sociedad y, por delante, de Betis, Athletic y Osasuna. No es que el ‘submarino amarillo’ sueñe con la Europa League, no, no, que va, ¡es que sueña con la Champions!, porque si la UEFA dejase de invitar al Barça a la Copa de Europa de la próxima temporada por el ‘caso Negreira’, el quinto de la Liga ocuparía su lugar en el bombo europeo. ¿Difícil?, bueno, mejor acabar quinto, sí, ‘porsiaca’.
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