Los azulgranas desean ganar al Rubin por primera vez

Dos alicientes tiene el partido de esta noche ante el Rubin Kazan: uno económico y otro deportivo. El primero viene motivado por el premio que concede la UEFA por cada victoria en la Liga de Campeones: 300.000 euros. Una cantidad nada despreciable teniendo en cuenta las arcas del club. El otro reto incumbe al orgullo de los azulgranas, que todavía no han logrado derrotar al conjunto ruso después de tres enfrentamientos (una derrota, en el Camp Nou, y dos empates en Kazan).

Por eso el Barça buscará romper ese maleficio que le persigue cuando de por medio se encuentra al equipo de Kurban Berdyev, que hoy volverá a agarrarse a su rosario para mantener esa imbatibilidad ante los azulgranas y, de paso, buscar la clasificación para los octavos de final del torneo por vez primera en la historia del club. Algo de ventaja tendrá: Guardiola dejará a muchos titulares en el banquillo.