La Orchestra Baobab resucita en Blues & Ritmes

Dos décadas antes del fenómenoBuena Vista Social Club, la música cubana arrasaba en Senegal. De aquella pasión colectiva surgieron grupos que cantaban en castellano sin apenas entender las letras de sus canciones. La Orquestra Baobab salió, en 1970, de esa escena obsesionada con los sonidos caribeños, pero optó por contar sus historias también en wolof y mandinga.

Mientras la Star Band, de la que saldría Youssou N’Dour, se asentaba en el Club Miami, de Dakar, la Orquestra Baobab surgió como grupo oficial del local del mismo nombre. Desplegó una música exuberante, asentada en seis voces solistas que tejían armonías depuradas, y en la precisa labor de Barthélemy Attisso con la guitarra eléctrica. El suyo era un menú con actitud pop que se alimentaba de aquellos ritmos cubanos y añadía otros ingredientes: rumba congoleña, influencias criollas portuguesas de la región de Casamance y ecoshighlife, el género elitista con raíces en Ghana.

‘REVIVAL’ DORADO / A su etapa clásica corresponden discos comoOn verra ça!, grabado en París en 1978 y que no vio la luz hasta 1992. En los 80, el cansancio y la competencia del emergente génerombalaxllevaron al grupo a la disolución, pero con el cambio de siglo llegó elrevival: el productor Nick Gold, el hombre que, al frente del sello World Circuit, inventó la operaciónBuena Vista Social Club, se acordó de los sobrinos africanos de la música cubana y sacó del desván una grabación semiperdida,Pirates choice, de 1982. Se completaba un ciclo. Tras la reedición, el grupo alumbró material nuevo enSpecialist in all styles(2002), al que siguióMade in Dakar (2007).

Sus armonías vocales y su flujo de ritmos siguen igual de frescos y subyugantes, como vimos en Bikini en el 2002. Esta vez, ejercen de atracción del festival Blues & Ritmes.

Orchestra Baobab

Teatro Zorrilla • Sábado 18 • 21.00 h • 18 €