Roi le da merengue a Roberto Leal en 'Bailando con las estrellas'

Vaya cachondeo tenemos, ¿no?

Roi Méndez con bocadillo: "Hola, ¿me explicas?"
Roi Méndez con bocadillo: "Hola, ¿me explicas?" / RTVE

'Bailando con las estrellas' es un programa que lo tiene todo: famosillos, música, talento y sobre todo, mucho cachondeo. En esta edición, ,Pelayo Díaz tuvo que decir adiós a la pista de baile, una pena, mientras que Busta se mantiene fuerte gracias a su Yana, que le da vitamina, energía y de todo. Mientras que los concursantes lo daban todo para hacerse con la victoria, había quien casi se raja antes de actuar. Sí, hablamos de Roi Méndez que fue como invitado a la gala para batirse en duelo con Roberto Leal. Qué les gusta a estos dos un pique, madre mía.

El caso es que el triunfito, que no es la primera vez que se apunta a algo así con el que fue presentador de 'OT', a última hora le entraron los miedos y casi abandona. En su 'stories' se ve lo nervioso que estaba mientras que Roberto le pica. Horas antes de la actuación, Roi intentó escabullirse de la forma más cutre: buscando en Google excusas. Cosa que todos hemos hecho cuando no queríamos ir a un sitio. Lo de calentar el termómetro para fingir fiebre queda lejos.

"Aprender a bailar en una mañana" o "rajarse de una batalla de baile" es lo que aquí el triunfito buscó. Pues lo llevó claro. Como no es la primera vez que se mete en un berenjenal de estos (y como quería ganar si o si a Leal) fue directo al grano e hizo la búsqueda más efectiva: "Partirle a las piernas a un presentador andaluz".

Bromas aparte, al final el cantante consiguió sentir el ritmo 'in the body' y se marcó un merengue fantástico a ritmo de 'Pégate'. Todo iba a las mil maravillas hasta que el presentador entró en acción y le 'robó' a su bailarina.

Tras la coreo, el jurado decidió con un empate que tuvo que deshacer Rocío Muñoz, quien también probó los movimientos de cadera del gallego:

¿Cómo acabó la batalla? Pues con Roi vencedor y con un abrazo y un te quiero entre los amiguis. Si es que en realidad son unos buenazos...

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